NUREMBERG (ALEMANIA), 15 (EUROPA PRESS)
La selección de Inglaterra, que recibió sus primeras críticas el sábado tras su discreta victoria en el estreno ante Paraguay, busca hoy un triunfo que le permita encarrilar su pase a octavos de final y mejorar su imagen ante Trinidad y Tobago, que sumó un valioso empate en la primera jornada.
El 1-0, con gol en propia puerta de Gamarra, ante Paraguay no llenó las expectativas de los seguidores de los 'pross', que confían ciegamente en este grupo y esperaban un resultado más abultado y, una vez sacudidos los miedos del debut, los ingleses ansían ver hoy mejor juego.
Sobre todo con un equipo plagado de estrellas de los mejores clubes del país, que llevan varias temporadas brillando en Europa y a la espera de que la recuperación de Wayne Rooney, que es casi seguro que hoy no juegue, sirva de inyección de moral y calidad para el grupo en los próximos duelos.
Pese a que el equipo no acabó de convencer, es muy posible que Sven Goran Eriksson repita el mismo once, con Beckham, Gerrard, Lampard y Joe Cole, en el centro del campo, uno de los más poderosos del mundo, y Owen y Crouch en punta.
El menudo delantero del Newcastle no está aún en plenas condiciones tras su lesión y no está para aguantar un partido completo, pero su viveza, oportunismo y calidad siempre es un arma poderosa, que esperan se compenetre mejor esta vez junto al espigado Crouch, que brilló en los amistosos, pero el sábado no tuvo suerte.
El fuerte calor fue el principal handicap de los futbolistas ingleses, que esperan que hoy sea algo inferior al jugar tres horas después y más ante un rival caribeño más acostumbrado a las altas temperaturas que los de las Islas.
LA ANTIGUA COLONIA QUIERE REVELARSE
En frente tienen a una selección, la de Trinidad y Tobago, que sigue soñando con que su debut mundialista no sea sólo algo romántico sino también dar muestras de su calidad y, que tras su empate sin goles en ante los suecos busca su primer gol.
Los dos equipos se conocen a la perfección, ya que además de ser antigua colonia de Inglaterra, gran parte de los trinitenses juegan en Gran Bretaña, entre ellos el portero Shaka Hislop, del West Ham, que quiere seguir imbatido.
Además, Dwight Yorke, que ahora milita en el Sydney FC, vivirá, a sus 34 años, uno de los partidos más emotivos de su carrera, no sólo por jugar un Mundial sino por enfrentarse a viejos compañeros y amigos como Beckham o Gary Neville, con los que coincidió de 1998 a 2002 en el Manchester United, ganando en 1999 la mítica Liga de Campeones.
El ariete será una de las principales armas de los caribeños, junto a John Stern, mientras que destacan las bajas del defensa Avery John, expulsado ante los suecos, y de Marvin Andrews y Kelvin Jack, lesionados.