MADRID, 24 Dic. (EUROPA PRESS) -
El patinador español Javier Fernández tiene claro que hará todos los esfuerzos necesarios para seguir mejorando en su deporte "porque si quieres un sueño tienes que ir a buscarlo" y que no dejará de arriesgar en sus programas porque "no hay otro camino" para conseguir éxitos, asegurando que su cuarto puesto en los Juegos de Sochi será un acicate para los próximos.
"Si quieres un sueño tienes que ir a buscarlo. Personalmente, yo y mi familia hemos tenido que dejar cosas para conseguir lo que estamos consiguiendo", aseguró Fernández en 'El Partido de las 12' de la cadena COPE.
En este sentido, confesó que "siempre se aprende" de cada competición que "es un entrenamiento mental y físico", y por ello su cuarto puesto en los Juegos de Sochi también fue una lección para saber que "aunque entrenes al máximo no siempre se consiguen los resultados", recordando que tuvo "fallos tontos" y que hubo otros que patinaron "mejor".
De todos modos, el madrileño advierte que para él "no hay otro camino" que seguir arriesgando en sus programas. "Me lo juego todo y si pierdo tengo que volver a entrenar para estar en mejores condiciones. No hay que mirar para atrás sino al futuro y ver los errores para rectificarlos", comentó.
"Lo que me pasó en los Juegos no fue negativo, fue una competición estupenda, con mis fallos, y lo que me ha hecho ser cuarto es lo que me va a empujar para los siguientes Juegos", añadió el actual campeón de Europa.
El primer objetivo en 2015 será buscar el tercer oro consecutivo continental, lo que sería "la bomba", aunque no quiere hablar de posible fracaso si no lo logra. "Lo podré decir tras la competición. A lo mejor hago unos programas estupendos y llega uno y tiene su momento mundial. Si patino bien y no soy el primero estaré contento", apuntó.
"Conseguir un tercer oro es una meta bastante importante porque no todos lo han conseguido y en el Mundial me quiero meter en el podio y ojalá sea el segundo o el primero por dar un pasito más, pero estaré contento si estoy en el podio", añadió también en relación al próximo Mundial.
El patinador español indicó que está "a gusto" con sus dos nuevos programas, que son de "mucha más dificultad" que los de 2014. "Por eso es más difícil hacerlos perfectos. Si salen bien lo dejaré complicado para mis rivales", avisó.
"NECESITAMOS AYUDAS Y BASTANTES".
Uno de sus grandes rivales es el japonés Yuzuru Hanyu, actual campeón olímpico y compañero de entrenamientos. "No es inalcanzable. Es superorganizado, no suele fallar y es muy constante. Sus elementos suelen ser perfectos y los jueces le tienen como favorito, pero todos llegamos a flojear y tengo que aprovechar de que esto le pase a otros. Si él da u pasito adelante, yo tengo que dar uno y medio", declaró.
Fernández también señaló que en España la gente se acostumbra "mucho" a las medallas y que si ahora no gana la de oro no le dicen "nada". "Nos ponemos retos más importantes y la gente se va olvidando de lo que pasaba hace dos años, que era demasiado difícil llegar y cuando llegabas era increíble", puntualizó.
"Sigo fuera de España. Las ayudas poco a poco van apareciendo, pero necesitamos y bastantes. Acabo de firmar con un nuevo club porque me daba más facilidades y más horas de hielo privadas para cuando vengo unos días en Navidades y el mes y medio en primavera y verano", recalcó el madrileño, que subrayó que "sigue siendo complicado cerrar un acuerdo con un patrocinador". "El patinaje no es todavía muy conocido y esperemos que pronto lo sea y que la gente que venga detrás tenga un camino más fácil", agregó al respecto.
El doble campeón de Europa destacó que a nivel económico no se puede quejar pero que tiene sus "limitaciones". "La federación está aportando todo lo que puede, pero es un deporte muy caro, sobre todo en Canadá y los Estados Unidos", afirmó Fernández que cifró en 1.500 dólares al mes lo que gasta en entrenador, 17.0000 en coreografía y en 1.000 por cada traje.
