Varios.- Lissavetzky advierte que irán "en serio" y no tolerarán comportamientos racistas en el deporte

Actualizado: miércoles, 29 marzo 2006 21:47

ZARAGOZA, 29 Mar. (EUROPA PRESS) -

El secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky, aseguró hoy que actuarán con "rigor y severidad" ante posibles comportamientos racistas dentro y fuera de los terrenos de juego.

"Vamos a ir en serio con las sanciones", advirtió Lissavetzky en el marco del salón SIC-Tecnodeporte, que se celebra hasta el 31 de marzo en las instalaciones de Feria Zaragoza, porque "no podemos taparnos los ojos" ante brotes de tinte violento o xenófobo.

El secretario de Estado para el Deporte acompañó a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) en su adhesión al Protocolo contra el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte, un documento que plasma la filosofía que se recoge en el anteproyecto de ley aprobado por Consejo de Ministros y que en el plazo de un mes y medio podría pasar a debatirse ya en el Congreso, adelantó Lissavetzky.

SER INFLEXIBLES.

Esa futura ley incluye una treintena de medidas encaminadas a erradicar esos brotes racistas que en determinados momentos existen. "Cada vez somos más conscientes de estos brotes y hay mayor sensibilización", reconoció el secretario de Estado para el Deporte. No obstante, el reto está en ser "inflexibles" y no tolerar estas actitudes.

Estas actuaciones pasan por un endurecimiento de las sanciones, no sólo a aquellos que se comporten violentamente dentro de los campos de juego, sino también en los aledaños de los estadios. "Los castigos serán más severos", insistió. Además, se están estudiando medidas de vigilancia que se extiendan al transporte de aficionados en los partidos, una ley que "hemos copiado de los ingleses, con el ejemplo de los hoolingans".

También se podrá incluso llegar a cerrar estadios o quitar puntos de la clasificación a un equipo concreto. Por otra parte, también se podrá rebajar la sanción o incluso quitar a aquellos clubes que colaboren en la identificación de estos individuos, matizó Lissavetzky, quien puso de manifiesto la importancia de conseguir que afloren las hinchadas ultras, que "son las que en muchos casos promueven y catalizan estas actitudes violentas".

En definitiva, se trata de actuaciones encaminadas a la prevención, localización y sanción de este tipo de manifestaciones racistas. "El deporte une e integra, pero nunca ha sido un factor de confrontación", concluyó.