Varios.- Sebastián Alvaro: "Me habría gustado nacer hace 100 años, los mapas aún estaban en blanco"

Actualizado: jueves, 18 mayo 2006 17:23

"No somos superhombres, sólo personas normales que quieren hacer cosas extraordinarias"

"Admiro la capacidad de Rafa Nadal de echarse todo sobre su espalda en los momentos difíciles"

MADRID, 18 May. (EUROPA PRESS) -

Sebastián Alvaro, director del programa 'Al filo de lo imposible', repasó hoy muchos de los innumerables grandes momentos que la serie ha dejado en sus 25 años de emisión en televisión, dejando claro que lo que su equipo hacía era "algo más que deporte, pero con los mejores valores deportivos".

El aventurero, recién nombrado Premio Nacional del Deporte de las Artes y las Ciencias, repasó, apoyado por un documento visual, lo que el programa pretendía mostrar, la habilidad para "contar historias" y recordar "el miedo del hombre y la capacidad para vencerle", aunque subrayó que todos aquellos que participaban en 'Al filo de lo imposible' no eran "superhombres", pese a que ponían "su vida en riesgo", sino simplemente "personas normales que quieren hacer cosas extraordinarias".

"Estamos ofuscados por los deportes-espectáculo y la importancia de ganar. Nuestro premio de ganar son los diez minutos de presenciar un paisaje absolutamente increíble, pero luego queda la mitad del trabajo que es el descenso al campo-base", resumió Alvaro en su presencia en el Foro de la Fundación Ferrándiz.

Además, el director del programa afirmó que había que tener mucha "cabeza" para realizar todo tipo de aventuras y hazañas. "No se pueden cometer equivocaciones, te estás jugando la vida. 'Al filo de lo imposible' es ir más allá y debes rodearte de gente capaz y hay que saber formar equipos", añadió al respecto.

Sebastián Alvaro enseñó imágenes de muchos de los viajes del equipo (desierto líbico, barrancos, espeleobuceo, el K-2, el polo norte,...) mezcladas con recordatorios a otros precursores como Shackleton, Amundsen o Mallory, y no dudó en decir que la serie, que no había tenido "una vida fácil", había provocado que en España "se pueda entender la aventura".

Sin embargo, el expedicionario destacó que le habría gustado nacer "hace cien años". "El mundo se conocía, pero los mapas estaban en blanco y quedaba todo por hacer", aseguró, indicando que "el descubrimiento de América y la exploración del Asia Central y de Africa" eran lo "más grande" realizado por el hombre.

"EL TRIUNFO EN 2004 FUE BAJAR A JUANITO Y EDURNE".

En su curriculum, Alvaro resaltó los ascensos K-2 por su "prestigio", pese a la tensión que se vivió en 2004 cuando sufrieron problemas en el descenso al campo-base por parte de Juanito Oiarzabal y Edurne Pasabán. "Era el 50 aniversario de la cumbre y teníamos una cuenta pendiente porque perdimos a un compañero en un descenso. Sin duda, el mayor triunfo de aquella aventura fue descender a Juanito y Edurne", confesó.

Otro mal momento para el director de 'Al filo de la imposible' fue cuando en un descenso de barrancos en 2003 en Isla Guadalupe se produjo un fatal accidente donde perdió la vida Xabier Iturriaga y Esther Sabadell sufrió cerca de 20 facturas y permaneció 18 horas hasta que la rescataron, algo que no impidió que se recuperase y volviese a escalar con el equipo.

Sebastián Alvaro apuntó que había sido "irrepetible" haber hecho los catorce 'ochomiles' y los tres polos, y que lo más "arriesgado" había sido ir andando al Polo Norte, rememorando lo realizado a principios del siglo XX por Shackleton.

En cambio, entre las espinas clavadas en el expedicionario se encuentran "dos o tres", aunque fundamentalmente le gustaría "reconstruir las aventuras de Luis de Saboya, Duque de los Abruzos".

Lejos de lo que significa 'Al filo de lo imposible', el aventurero elogió la figura del tenista Rafa Nadal. "Pedrosa o Alonso son extraordinarios, pero van encima de una máquina. Nadal va camino de convertirse en el más grande deportista de España. Es un ganador, modesto y tiene la capacidad en los momentos difíciles de echarse todo sobre su espalda", detalló.

Además, Alvaro se refirió a los problemas medioambientales. "Creo que hemos sobrepasado la alarma. Estamos en peligro de extinción porque sabemos adaptarnos al frío, pero no al calor", advirtió.

Finalmente, el expedicionario aseguró que uno no podía "elegir la forma de morir". "Sí podemos elegir la vida que tenemos y la mía ha merecido inmensamente la pena. He estado rodeado de gente buena y con la que podría ir al fin del mundo", sentenció.