MADRID, 20 Ene. (EUROPA PRESS) -
El tenista español Carlos Alcaraz se enfrenta este martes al serbio Novak Djokovic en los cuartos de final del Abierto de Australia, primer 'Grand Slam' de la temporada, en el que será la reedición de la final de los Juegos Olímpicos de París 2024 que coronó al de Belgrado, primer gran obstáculo para el murciano en busca de sus primeras semifinales en Melbourne.
Carlos Alcaraz sigue firme en el camino hacia su primer Abierto de Australia, con el que busca completar el 'Grand Slam' tras su triunfos en el US Open (2022), Roland Garros (2024) y Wimbledon (2023 y 2024). Pero en los cuartos de final, su barrera en este 'grande', tendrá la primera prueba de nivel de la temporada en la figura del diez veces ganador en Melbourne.
El serbio será el primer puerto de categoría especial a superar en su particular etapa 'reina' hacia el primer 'grande' de la temporada, ya que, presumiblemente, en semifinales y final le esperarían el alemán Alexander Zverev y el italiano, actual campeón y número uno del mundo Jannik Sinner, respectivamente.
La Rod Laver Arena será el escenario que acogerá, ante casi 15.000 espectadores, el octavo duelo entre el serbio y el español. Los precedentes son favorables al 24 veces ganador de 'Grand Slam', que ha ganado cuatro de las siete veces que se han enfrentado. La última vez que se midieron fue en la final de los Juegos Olímpicos, que acabó coronando a Djokovic como medallista de oro en las pistas de Roland Garros.

Tampoco invitan al optimismo los procedentes en pista dura, que siempre se han saldado con victoria de 'Nole', tanto en la recordada final de casi cuatro horas en Cincinnati en 2023 (5-7, 7-6, 7-6) como en las Finales de la ATP de meses después (6-3, 6-2). Sin embargo, el tenista de El Palmar se agarrará a la estadística de sus duelos en partidos de 'Grand Slam', en los que el balance es favorable a Alcaraz con dos victorias por una derrota. De hecho, sus dos victorias fueron en las dos finales de otro de los torneos predilectos del balcánico, Wimbledon, donde el pasado verano el español le arrolló sin ceder por primera vez ningún set (6-2, 6-2, 7-6).
En cuanto al estado de forma en el que llegan a los cuartos de final, tanto Alcaraz como Djokovic han ido de menos a más en el desarrollo del torneo. El español ha cedido un solo set, ante el portugués Nuno Borges, en los cuatro partidos que ha jugado en Australia para plantarse en cuartos de final por dos del serbio, que ha ido elevando y afinando su tenis en sus dos últimos duelos ante los checos Tomas Machac y Jiri Lehecka.
A nivel físico, el murciano llega algo más fresco, ayudado seguramente por el abandono de Jack Draper tras dos mangas en octavos, lo que le ha ahorrado algo más de una hora en comparación con su rival, al que la edad, 37 años, parece no pesarle todavía.
Tenísticamente, los dos prometen un gran espectáculo en la noche australiana, factor que desagrada más al de El Palmar, que ha ido afinando poco a poco un nuevo saque con el que ha ganado potencia, velocidad y que le ha permitido acortar sus puntos al servicio. Esta nueva arma se pondrá a prueba ante uno de los mejores restadores del circuito que ha ido ganando la solidez que le caracteriza según avanzaba el torneo, recuperando también uno de sus mejores golpes, el revés a dos manos, que vuelve a correrle como en sus mejores tiempos.