MADRID, 14 sep. (EDIZIONES)
El Santuario de la Madonna della Corona es una de las más famosas y antiguas iglesias de la región del Vénteto, cerca de Verona, en Italia.
El lugar de culto está construido aferrándose a las rocas que lo rodean como si estuviera esculpido en las propias paredes de la ladera escarpada del Monte Baldo, a unos 774 metros sobre el Valle dell'Adige.
Con este espectacular paisaje como excusa, el fotógrafo Matteo Bertaggia, de 23 años, decidió sacar de paseo su dron para tomar algunas imágenes a vista de pájaro de la peculiar iglesia construida en la ladera de la montaña.
La Madonna della Corona fue construida en el año 1530 y se puede acceder a ella a través de una escalera o un túnel excavado en la ladera de la montaña.
La iglesia permanece abierta todo el año de noviembre a marzo, de ocho de la mañana a seis de la tarde, y de abril a octubre, de 7 de la mañana a siete y media de la tarde.