MADRID, 15 Ene. (EDIZIONES) -
Cyle y Nick tuvieron una juventud difícil. Gracias al apoyo de un proyecto para jóvenes de la zona, consiguieron cambiar sus vidas. Ahora, estos dos jóvenes en Reino Unido tienen un negocio de decoración juntos y arreglan la habitación de una persona desfavorecida cada mes con parte de los beneficios que hayan obtenido durante las semanas anteriores.
"Crecimos en la pobreza", dice Nick a través de la web de 'start-up' 'Good Guys Decorating'. "Hemos visto cómo nuestra familia y nuestros amigos luchaban con todo: el crimen, las drogas, la cárcel, la violencia, la salud mental. Hemos estado ahí y lo hemos visto todo. Sin embargo, también hemos tenido la ayuda y la guía para estar en una posición en la que hacer una diferencia", añade.
Esta "guía" provino de Carney's Community, el gimnasio londinense en el que ambos se conocieron. Este centro se propone contrarrestar la mala situación del municipio de Wandsworth a través de un programa de prevención de criminalidad entre los jóvenes con "actividades positivas, deporte y orientación". Esta localidad tiene zonas con altos índices de pobreza infantil y desempleo, menores de entre 16 y 18 años que ni estudian ni trabajan y problemas tanto de obesidad infantil como de abuso de las drogas, según denuncia la organización en su página.
Carney's Community ofrece "apoyo a largo plazo" a sus miembros y esto incluye en el inicio de negocios como los de 'Good Guys Decorating', según dicen Cyle y Nick en su web. "Una parte de nuestro papel es trabajar con aquellos de nuestros miembros que muestran interés o pasión a la hora de iniciar sus propios negocios y proyectos", dice el director de Carney's Community en la página de la empresa. "Es mi trabajo hablar con los negocios locales de largo recorrido para buscar su apoyo. La mayoría están abiertos a la idea porque ayudar a que la gente encuentre trabajo tiene un efecto total sobre sus vidas y su proceso de toma de decisiones", añade.
Cyle y Nick optaron por dedicarse a la decoración porque siempre habían sido "naturalmente buenos en ello" y "siempre habían querido tener un negocio propio", según explican en el vídeo de Caters News. Sin embargo, no querían limitarse a tener su propia empresa, sino que deseaban que además ésta tuviese un impacto positivo en su comunidad.
Por ello, estos dos jóvenes eligen cada mes a una persona (que ya esté en contacto con Carney's Community u otras organizaciones) y le decoran la habitación sin coste alguno, proyecto al que dedican parte de lo recaudado en cada trabajo de las semanas anteriores.
Nick subraya que 'Good Guys Decorating' no es una ONG, sino "una empresa de decoración como otra cualquiera" y que "es sólo que nosotros decidimos darle apoyo a alguien a partir de nuestro propio tiempo y de nuestro propio dinero". Con ello, cumplen lo único que les pidieron en Carney's Community, según recalca Nick en el vídeo: que cuando consiguieran encarrilar su día a día, diesen a otras personas el mismo apoyo que ellos habían recibido.