MADRID, 13 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno no ha realizado ninguna "promesa de rescate" a la inmobiliaria Martinsa ni a ninguna otra empresa de sector y niega que el Ministerio de Economía y Hacienda o la Oficina Económica de Presidencia intervinieran en la decisión del Instituto de Crédito Oficial (ICO) de no conceder el crédito de 150 millones de euros a la compañía que preside Fernando Martín que provocó en última instancia su declaración de concurso de acreedores.
En una respuesta parlamentaria al portavoz adjunto del PP en el Congreso de los Diputados, Álvaro Nadal, a la que tuvo acceso Europa Press, el Ejecutivo asegura que el ICO optó por rechazar esta financiación porque la compañía no presentó las "suficientes garantías" sobre la viabilidad de su proyecto, y reiteró que el Instituto no puede sustituir al sistema financiero para resolver los problemas de "empresas concretas".
Asimismo, señala que la admisión del concurso de acreedores de Martinsa-Fadesa debe proporcionar "cierta tranquilidad" a los clientes de la compañía, si bien precisó que el Gobierno hará todo lo posible para garantizar los derechos de los cuidadnos que adquirieron una vivienda a la inmobiliaria, así como los de los empleados afectados por el expediente de regulación de empleo (ERE).
ACTUACIÓN DE LA CNMV.
El Gobierno descarta también que la situación de Martinsa-Fadesa tenga efectos "significativos" en la situación financiera ni haya provocado una "penalización adicional". "No cabe esperar, por tanto, que los flujos de financiación exterior se deterioren por este motivo".
Por último, defiende la actuación de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en este caso para "favorecer la transparencia y garantizar los derechos de los de los pequeños accionistas" de Martinsa-Fadesa.
En la misma línea, asegura que el tanto el presidente del organismo, Julio Segura, como el entonces vicepresidente, Carlos Arenillas, actuaron "de acuerdo con sus competencias".
