Economía/Macro.- Blanco detallará el impacto del ajuste en infraestructuras el 22 de julio en el Congreso

Actualizado: jueves, 15 julio 2010 17:30


MADRID, 15 Jul. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Fomento, José Blanco, detallará el próximo jueves 22 de julio el impacto que tendrá en las obras que actualmente desarrolla su Departamento el recorte de 6.400 millones de euros que sufrirá la inversión pública en infraestructuras en lo que queda de año y en 2011 como consecuencia de las medidas de reducción del déficit.

Blanco informará sobre los proyectos que se suspenderán, de aquellos que se demorarán y de los que siguen su curso en una comparecencia en la Comisión de Fomento de la Cámara Baja, indicaron hoy a Europa Press en fuentes del Ministerio.

La intervención tendrá lugar dos meses después de que el pasado mes de mayo, y también en sede parlamentaria, el titular de Fomento anunciara que su Ministerio sufrirá el mayor recorte inversor como consecuencia de las medidas antidéficit.

En aquella intervención, el ministro ya advirtió de que el ajuste tendrá "consecuencias en todo el territorio" y de que obligaría a Fomento a "replantear toda su programación de inversión pública" y "reprogramar la mayoría de las inversiones que actualmente se acometen y a reconsiderar las que no sean imprescindibles".

"Esto se traduce en que vamos a posponer nuevas licitaciones, demorar plazos de financiación de obras, suspender temporalmente actuaciones e incluso anular contratos en ejecución", indicó entonces Blanco.

La comparecencia programada para la próxima semana se registra después de que los altos cargos de Fomento hayan analizado toda su cartera de obra en diseño o ejecución (más de 3.000 proyectos) y se hayan reunido con las patronales del sector (Seopan, Aerco y Anci) y las federaciones de construcción de los sindicatos UGT y CC.OO.

Las constructoras y los representantes de los trabajadores calculan que este recorte inversor se cobrará entre 96.000 y 115.000 empleos en dos años.

EL MENOR IMPACTO POSIBLE.

Según ha transcendido de fuentes estos encuentros, el departamento de Blanco procurará cancelar el menor número de contratos de obra y, en vez de ello, apostará por demorar en el tiempo su ejecución. Para las cancelaciones se tendrá en cuenta el grado de ejecución de los proyectos y su coste.

En el sentido opuesto, escaparán a los retrasos de entre uno y cuatro años previstos en la ejecución de las obras aquellas que estén prácticamente terminadas (ejecutadas en más de un 80%) y las que se consideren prioritarias para la competitividad económica.

Entre estas últimas destacan las de las líneas de ferrocarril de Alta Velocidad (AVE), además de proyectos de Puertos del Estado y Aena, que se autofinancian. Por contra, el sector de la construcción ya cuenta con un parón en la licitación de nuevos contratos de autovías y autopistas.