Ocaña reitera que el superávit del conjunto de administraciones públicas en 2006 puede ser superior al 1,1% del PIB del pasado año
MADRID, 19 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Estado registró hasta agosto un superávit de 10.578 millones de euros en términos de Contabilidad Nacional, lo que equivale al 1,1% del PIB y supone un incremento del 37,9% respecto al superávit obtenido en el mismo periodo del año anterior, según informó hoy el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña.
Este resultado fue consecuencia de unos ingresos no financieros que ascendieron hasta agosto a 90.959 millones de euros, un 11% más, y de unos gastos no financieros que se elevaron a 80.381 millones, con un incremento del 8,2%.
En términos de caja, que computa los ingresos y gastos que efectivamente se han realizado durante el periodo, el Estado alcanzó un superávit de 4.578 millones de euros, frente a los 2.408 millones obtenidos en el mismo periodo del año anterior.
Ocaña señaló que el Gobierno confía en que el cierre del año será "al menos tan bueno" como el de 2005, cuando el conjunto de las administraciones públicas obtuvo un superávit del 1,1% del PIB. Incluso indicó que, a la vista de los datos de recaudación y de crecimiento del PIB, se podría esperar un superávit "un poquito mejor" que el conseguido el pasado año, aunque advirtió de que en los últimos meses del ejercicio se concentran gastos adicionales.
La recaudación neta hasta agosto ascendió a 119.727 millones de euros, un 8,3% más que en 2005. En concreto, los impuestos directos se elevaron hasta los 62.641 millones de euros, lo que supone un aumento del 13,6%.
Dentro de este capítulo, la recaudación por el IRPF creció un 13,7%, hasta los 39.256 millones de euros, debido al buen comportamiento del ingreso del primer plazo correspondiente a la campaña de renta 2005, así como al incremento de los ingresos obtenidos por retenciones del trabajo, en línea con la evolución del crecimiento de la economía española.
Por su parte, los ingresos por el Impuesto sobre Sociedades crecieron un 15,3%, gracias a los mayores ingresos del primer pago fraccionado (realizado en abril) y a la liquidación del ejercicio 2005 durante el pasado mes de julio. Ocaña señaló que, en términos homogéneos, la recaudación por este impuesto aumentó hasta agosto un 16,9%.
EL IVA CRECE POR ENCIMA DEL 8%.
Los ingresos por impuestos indirectos alcanzaron los 50.068 millones de euros, un 7% más que en el mismo periodo del año anterior. La recaudación por IVA se situó en 36.045 millones de euros, lo que supone un aumento del 8,7%.
Los impuestos especiales incrementaron su recaudación un 2,1%, hasta alcanzar los 12.126 millones de euros. De este capítulo, destacan los ingresos del Impuesto sobre Hidrocarburos, que crecieron un 1,6% (6.878 millones), y los del Impuesto sobre las Labores del Tabaco, que aumentaron un 0,6% (3.818 millones).
IMPORTANTE CAIDA DEL PAGO DE INTERESES.
Por el lado de los pagos, los no financieros representaron un total de 84.301 millones de euros, con un aumento interanual del 4,5%. Los gastos financieros, por su parte, experimentaron un descenso del 14,4%, hasta los 13.116 millones de euros, gracias al diferente calendario de vencimiento de los intereses de la deuda.
Los pagos por gastos de personal se elevaron hasta los 14.265 millones de euros, lo que supone un aumento del 7,5%, derivado de la mejora de las retribuciones en determinadas áreas de la Administración Pública, al tiempo que las transferencias corrientes se incrementaron un 11,8%, hasta los 45.753 millones de euros.
ESCASO AUMENTO DE LAS INVERSIONES.
Finalmente, las operaciones de capital descendieron un 1,1% hasta agosto, con 8.983 millones de euros, mientras que las inversiones reales aumentaron un ligero 0,4% (4.993 millones de euros) y las transferencias de capital disminuyeron un 2,9% (3.990 millones de euros).
Ocaña señaló que, a pesar del escaso aumento de las inversiones reales, el nivel de ejecución de las mismas está en línea con el del pasado año en estas mismas fechas, y recordó que las inversiones se concentran habitualmente en los últimos cuatro meses del ejercicio.
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