VALENCIA, 1 Abr. (EUROPA PRESS) -
Valencia, Barcelona y Madrid concentraron el 60 por ciento del total de la deuda de las comunidades autónomas en 2005, que ascendió a 56.123 millones de euros, lo que supone un incremento del 8 por ciento respecto al año anterior, según los últimos datos hechos públicos por el Banco de España.
En concreto, la comunidad autónoma más endeudada en 2005 fue Cataluña, con 13.240 millones de euros, casi el 25 por ciento del total de la deuda acumulada en el conjunto de las comunidades.
Después de Cataluña, figura Madrid (10.099 millones de euros), que arrebata en 2005 la segunda posición a la Comunidad Valenciana, que registró una deuda de 10.085 millones. Entre las tres, acumulan el 60 por ciento del total del endeudamiento regional.
A continuación, figuran Andalucía (7.352 millones), Galicia (3.381 millones), Castilla y León (1.789 millones), Baleares (1.536 millones de euros), Canarias (1.475 millones), Castilla-La Mancha (1.351 millones), País Vasco (1.140 millones) y Aragón (1.153 millones). Por debajo de la barrera de los 1.000 millones de euros, se situaron Asturias (803 millones), Extremadura (783 millones), Murcia (691 millones), Navarra (646 millones), Cantabria (411 millones) y La Rioja (190 millones).
La deuda de La Rioja se situó en 2005 en 190 millones de euros, con lo que la región se coloca como la comunidad autónoma con menor endeudamiento, según los últimos datos hechos públicos por el Banco de España.
Según estos datos, la comunidad riojana redujo el año pasado un 1,5 por ciento su endeudamiento, que equivale al 2,8 por ciento de su Producto Interior Bruto (PIB).
LA DEUDA DE BALARES CRECIÓ UN 62%
En cuanto a la evolución de la deuda, en 2005 se incrementó de forma espectacular en Baleares, tras anotarse un aumento del 62 por ciento en comparación con 2004. También registraron aumentos importantes Castilla-La Mancha (27,8 por ciento), Canarias (25 por ciento), Castilla y León (23 por ciento) y Madrid (12,5 por ciento).
También aumentaron su deuda, aunque de forma más moderada, Cantabria (9 por ciento), Barcelona (8,3 por ciento), Valencia (7,9 por ciento), Galicia (3,5 por ciento) y Aragón (1,6 por ciento).
Por el contrario, la deuda descendió en el País Vasco un 17,8 por ciento, y también se redujo en Murcia (-7,6 por ciento), La Rioja (-1,5 por ciento) y Andalucía (-0,9 por ciento), mientras que se mantuvo estable en Asturias, Extremadura y Navarra.
VALENCIA TIENE UNA DEUDA DEL 11,5% DE SU PIB
Tomando el ratio deuda/PIB, Valencia se sitúa a la cabeza de la deuda autonómica, con un volumen que alcanza ya el 11,5 por ciento de su PIB, seguida de Cataluña (7,8 por ciento), Galicia (7,4 por ciento), Baleares (6,8 por ciento) y Madrid (6,3 por ciento), todas ellas por encima de la media (6,2 por ciento). Los porcentajes son menores en Andalucía (5,9 por ciento), Extremadura (5,2 por ciento), Castilla-La Mancha (4,4 por ciento), Navarra (4,2 por ciento), Aragón y Asturias (4,1 por ciento), Canarias (4 por ciento), Castilla y León (3,7 por ciento), Cantabria (3,6 por ciento), Murcia (3 por ciento), La Rioja (2,8 por ciento) y País Vasco (2,1 por ciento).
LOS AYUNTAMIENTOS AUMENTAN SU DEUDA
Por su parte, las corporaciones locales arrojaron una deuda de 25.382 millones de euros en 2005, el 2,8 por ciento del PIB, lo que representa un incremento del 5,6 por ciento sobre el año anterior.
Del total de la deuda de las corporaciones locales, la mayor parte (20.118 millones) corresponde a los ayuntamientos, con un crecimiento del 7 por ciento, de los que 9.615 millones son de capitales de provincia (incluidas las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla), y 10.503 millones, del resto.
La deuda de los ayuntamientos de más de 500.000 habitantes (Barcelona, Madrid, Málaga, Sevilla, Valencia y Zaragoza) alcanzó los 6.475 millones de euros en 2005, lo que supone un incremento del 25 por ciento sobre la registrada en 2004.
Destaca el importante aumento del endeudamiento del consistorio de la capital, dirigido por el 'popular' Alberto Ruiz Gallardón, que incrementó su deuda un 57 por ciento en 2005, hasta los 3.337 millones de euros, lo que contrasta además con la reducción del 4,8 por ciento de la deuda del ayuntamiento de Barcelona, que sumaba 1.149 millones de euros a finales del pasado año.