El consumo de productos energéticos por parte de los hogares como consumidores finales creció un 1,9% en 2017

MADRID, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -

El consumo de productos energéticos por parte de los hogares como consumidores finales representó el 6,6% del total de los flujos físicos de la energía en 2017, con un incremento del 1,9% respecto al año anterior, según los datos de la 'Cuenta de los Flujos Físicos de la Energía' del Instituto Nacional de Estadística (INE).

Por su parte, las ramas de actividad de la economía usaron el 57,7% del total de los flujos físicos de la energía en 2017, con un aumento del 4,7% respecto al año anterior.

Mientras, el medioambiente recibió el 25,5% del total de los flujos físicos de la energía, en su mayor parte pérdidas de energía (calor disipado) debido a los distintos procesos productivos y a las actividades de consumo final.

El total de flujos energéticos, que tienen su origen en el medioambiente (recursos energéticos naturales), en la producción y la importación (productos energéticos) y en el consumo y la acumulación de residuos energéticos, ascendió a 20,064 millones de terajulios (TJ) en 2017, lo que supuso un incremento del 5,1% respecto al año anterior.

Atendiendo a su origen, los recursos naturales energéticos extraídos del medioambiente alcanzaron los 1,389 millones de terajulios en 2017, un 0,1% más que en 2016.

Por su parte, la oferta de productos energéticos ascendió a 13,368 millones de terajulios, un 6,6% más que el año anterior. De esta cifra, 7,640 millones de terajulios correspondieron a la producción interior y 5,727 millones de terajulios a las importaciones.

Por último, los residuos energéticos producidos, en su mayor parte calor disipado en los procesos de combustión, se incrementaron un 2,8%, hasta 5,306 millones de terajulios.

La producción interior de productos energéticos supuso el 57,2% del total de la oferta de este tipo de flujo físico, un 5,5% más que en 2016. Por su parte, las importaciones representaron el 42,8%, con un incremento del 8,1%.

POR TIPO DE PRODUCTO ENERGÉTICO.

Por tipo de producto energético, las mayores producciones correspondieron al coque y productos de refino del petróleo (56,6% del total), a los productos de la industria extractiva (23,7%) y a la energía eléctrica y calor (15,0%).

Mientras, los productos energéticos con mayor peso en las importaciones fueron los productos de la industria extractiva (79,1% del total) y el coque y productos de refino de petróleo (18,8%). Por su parte, las importaciones con menor peso fueron la energía eléctrica y calor (1,5%) y los biocombustibles (0,6%).