Reino Unido encarga un nuevo estudio científico del 'fracking' para tratar de depender menos del gas ruso

Archivo - 03 February 2020, England, London: A worker removes Union flags, the national flag of the United Kingdom, from flagpoles in Parliament Square, following events to mark the UK's departure from the European Union on 31st January 2020. Photo: Dom
Archivo - 03 February 2020, England, London: A worker removes Union flags, the national flag of the United Kingdom, from flagpoles in Parliament Square, following events to mark the UK's departure from the European Union on 31st January 2020. Photo: Dom - Dominic Lipinski/PA Wire/dpa - Archivo
Publicado: martes, 5 abril 2022 17:53

MADRID, 5 Abr. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno de Reino Unido ha encargado este martes un nuevo estudio científico al Servicio Geológico Británico sobre las "últimas evidencias científicas" del gas de esquisto con el objetivo de reducir la dependencia del gas ruso a medio plazo, según ha informado el Departamento de Empresa, Energía y Estrategia Industrial en un comunicado.

En 2019, el Ejecutivo ya decidió prohibir el 'fracking' en la región de Inglaterra después de que la Autoridad de Petróleo y Gas del país considerara que era "imposible" predecir la probabilidad o la magnitud de los sismos relacionados con esta práctica.

El estudio encargado por el Ejecutivo insta al Servicio a investigar si hay nuevas formas de fracturación hidráulica que reduzcan el riesgo de sismos, si dichas técnicas son adecuadas para Reino Unido y, en caso de que haya efectos geológicos, cómo se comparan esos efectos con los producidos por la energía geotérmica o la minería de carbón.

El Gobierno ha subrayado que la extracción de gas de esquisto "no es la solución a los problemas de precios a corto plazo". Sin embargo, considera necesario explorar "todos los métodos de producción y generación de energía posibles" para reducir la dependencia del gas ruso.

El informe del Servicio Geológico Británico se publicará a finales de año. El encargo de este estudio no altera la prohibición de 2019 de la actividad del 'fracking' en Inglaterra.