El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, y el presidente, Jordi Gual - EUROPA PRESS
VALENCIA, 31 Ene. (EUROPA PRESS) -
Alrededor de unos 5.000 trabajadores han salido de CaixaBank desde el ejercicio 2014 a través de planes de bajas voluntarias, si bien la entidad también ha contratado a unos 2.000 jóvenes en Barcelona y alrededores con el objetivo de rejuvenecer su plantilla.
Así lo ha explicado en la rueda de prensa de presentación de resultados 2019 el consejero delegado, Gonzalo Gortázar: "CaixaBank es una organización muy viva".
Ha incidido en que el grupo ha dado salida a los trabajadores de edad más avanzada, aunque también ha contratado a más jóvenes y ha creado nuevas líneas de negocio y servicios.
De hecho, CaixaBank abrió a mediados de enero un plan de prejubilaciones voluntarias para un máximo de 376 empleados dirigido exclusivamente a trabajadores de Barcelona y Teruel, y de 58 años o más.
Ha afirmado que la entidad tiene una visión "muy positiva" sobre la renovación de la plantilla y que no se prevén nuevas reducciones de personal al margen de este plan de desvinculaciones voluntarias incentivadas abierto en enero.
Actualmente, la entidad presidida por Jordi Gual cuenta con una plantilla integrada por 35.736 empleados, 1.704 menos respecto a 2018, y una red de 4.595 oficinas, 508 menos.
El año pasado, la entidad ya pactó con sindicatos un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectó a 2.023 trabajadores y que tuvo un coste bruto de 978 millones de euros --685 en términos netos--.
Esta medida ha impactado en los resultados de CaixaBank, que cerró el ejercicio 2019 con un beneficio atribuido de 1.705 millones de euros, un 14,1% menos.