MADRID, 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, ha asegurado este jueves que nadie le ha sugerido que dimita de su cargo al frente del organismo supervisor y que mantiene contactos con el PP desde que asumió el trabajo hace más de cinco años.
"He estado cinco años y medio en contacto con el principal partido de la oposición y en ningún momento, ni en público ni en privado nadie ha sugerido mi dimisión", aseveró. "Los más altos responsables del PP en ningún momento me lo han sugerido", agregó.
No obstante, apuntó a la posibilidad de que "pueda haber alguien del PP" proclive a que abandone el cargo antes de que expire su mandato durante el primer semestre de 2012.
El gobernador aprovechó las preguntas respecto al futuro Gobierno del PP para expresar su "gran satisfacción" ante el anuncio de que su prioridad será adoptar medidas en materia laboral para atajar la subida del paro. "Hace cuatro años nadie hablaba de la reforma laboral y decían que no era importante", valoró.
A su parecer, la reforma laboral es muy necesaria por diversas razones, tanto para ayudar a la reducción del déficit público a través de un mercado más eficiente, como para incidir en la reducción de la tasa de morosidad, que afecta a la caída de la demanda solvente de crédito.
Para el gobernador del Banco de España, la reforma laboral, unida a las liberalizaciones que promuevan entornos más competitivos, "es la única posibilidad en el contexto de la unión monetaria, para hacer una devaluación interna en un periodo relativamente corto".
