Economía/29S.- UGT inicia la cuenta atrás hacia la huelga general con una Asamblea en Madrid, "epicentro" de los paros

Actualizado: miércoles, 1 septiembre 2010 18:54

"El día 29 pararemos Madrid para que Madrid siga andando con los trabajadores a la cabeza", aseguran los sindicalistas

MADRID, 1 Sep. (EUROPA PRESS) -

El sindicato UGT ha iniciado la cuenta atrás hacia la huelga general con una Asamblea de Delegados en su sede en Madrid, que "sin ningún género de dudas va a ser el epicentro de los paros el día 29 de septiembre", ha destacado el secretario general del sindicato, Cándido Méndez.

La Asamblea, con una asistencia multitudinaria de afiliados, ha sido, tras la reunión de la Comisión Ejecutiva Confederal, el primero de los actos previstos para preparar la Huelga General del 29 de septiembre. El paro, la reforma laboral, las medidas de ajustes del Gobierno de Zapatero y la situación de precariedad en los servicios han sido el eje en torno al cual ha girado el acto.

La Asamblea ha contado con la intervención, además del citado Méndez, del secretario general de UGT-Madrid, José Ricardo Martínez, y los responsables del sindicato en la Federación de Servicios (FeS UGT) a escala nacional, José María Villa, y regional, Roberto Tornamira.

Los líderes sindicales han reiterado las razones por las que se hace "necesario" acudir a la huelga general, "un ejercicio de solidaridad profundamente democrático", en palabras de Méndez, que ha recordado que supone "una renuncia de un día de sueldo".

"Tenemos muchos motivos para ir a la huelga general: 4,6 millones de motivos", ha manifestado Tornamira, quien ve la jornada del 29-S como la oportunidad de dar respuesta a "los mercados, los organismos internacionales al servicio de los mercados, los voceros de los mercados y también dar un mensaje fuerte al Gobierno".

Precisamente el "quiebro en el discurso del Gobierno" ha sido el principal foco de críticas por parte de los líderes sindicales, que ven en el horizonte "una situación profundamente desalentadora". El objetivo con la huelga "no es otro que el Gobierno cambie sus planteamientos", pues tanto el Gobierno como el Parlamento, tal y como ha denunciado Martínez, "no están al lado de la ciudadanía".

"El Gobierno de la Nación tiene que ser consciente de que el principal apoyo que tiene, que le llevó y que le mantuvo en el poder, es la clase trabajadora, y con esas medidas este Gobierno se ha puesto enfrente de quien aupó para que gobernase pensando en todo", ha abundado.

Méndez ha manifestado en este sentido que "tiene que haber una rectificación" por parte del Ejecutivo, ya que "así no se puede combatir la crisis" y muestra de ello es la valoración política que los ciudadanos le otorgan, que se encuentra "desplomada". "No son aceptables democráticamente las posiciones a la derecha o más a la derecha", ha sostenido.

Respecto a la cuestión de si la huelga general es un acto contra un Gobierno socialista y que puede favorecer al partido de la oposición, el PP, Villa ha comentado indignado que esta posible interpretación es "lo que faltaba por escuchar". Es una protesta "contra un Gobierno que ha puesto en marcha medidas contra los trabajadores y que ha anunciado la posibilidad de que sigan más".

Los cuatro líderes han manifestado su convencimiento de que las medidas de ajuste llevadas por el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero no van a llevar a una recuperación. Méndez ha destacado que la muestra de ello es que tras su aprobación, "las previsiones eran peores".

La reforma laboral, que se encuentra en tramitación parlamentaria y que próximamente entrará en vigor, consideran, es "económicamente negativa". "Ahora oiréis el silencio de los empresarios", ha señalado el secretario general de UGT-Madrid. "Están callados porque están contentos, han conseguido lo que querían", ha añadido con sorna.

Los discursos en la Asamblea han destacado la ausencia de regulación en los mercados financieros, "el origen de la crisis", y por el contrario la desregulación con la reforma "de lo que está bien regulado", el mercado laboral. Por ello, ha señalado Tornamira, el contexto es de "atentado contra la negociación colectiva".

"Nos encontramos ante una situación peligrosa, en la que no se respetan ni leyes ni convenios", ha añadido. Para los sindicatos, la reforma lleva consigo la ausencia de la tutela judicial y el abaratamiento del despido. "¿Acaso no es ya lo suficientemente barato, con 4,6 millones de parados?", se ha preguntado Martínez.

REFORMA DE CAJAS DE AHORRO.

Otra de los puntos duramente criticados en la Asamblea es la reforma en las cajas de ahorro, "que se las regala y se pone en manos de los bancos y los especuladores", ha denunciado Tornamira. El secretario general de FeS Madrid ha señalado que los beneficios que tenían un carácter social van a pasar a ser dividendos.

Por ello, vislumbra en su reforma tres principales efectos: en la labor social que realizaban (el cierre en Madrid de un tercio de las bibliotecas y un tercio de los centros para mayores de Madrid); en el empleo ("se van a destruir por directiva del Banco de España entre 15.000 y 35.000 puestos de trabajo y cerrar entre 2.500 y 7.000 oficinas); y en el Estado, que "se niega a tener una red de distribución del crédito".

Todas las medidas que se han llevado a cabo, han sostenido los líderes, son "injustas y nada equitativas y que lastran la posible recuperación", y que las que asoman tampoco son motivo para la esperanza. "Tengo miedo a los presupuestos", ha confesado Tornamira, quien prevé en la Comunidad "reducciones en los apartados que van a resultar más gravosos y más lesivos para los trabajadores, y más beneficiosos para algunos empresarios".

Villa ha querido rechazar la idea de que las medidas tomadas para conseguir relanzar la economía hayan sido obligadas, algo que ha considerado "absolutamente falso" y para lo cual puso el ejemplo de la salida de las tropas de Irak al llegar Zapatero al poder.

También ha destacado el hecho de que se hagan recortes para ahorrar, después de que en Europa se hayan invertido "tres billones de euros para los responsables de la crisis", lo que demuestra "que sobra 'pasta' por un tubo".

Todos han hecho hincapié en la importancia de la huelga. "Si no ganamos, el Gobierno no cambiará de política. No es una resignación, tiene un coste personal, familiar y social; es un conflicto", ha sentenciado Villa.

"Hemos sido coherentes en las decisiones sindicales en función de las actuaciones de empresarios y Gobierno. Esta decisión del Gobierno supone un ataque de tal magnitud que obliga a los sindicatos de clase a convocar la Huelga General", ha manifestado Martínez.

"El día 29 pararemos Madrid para que Madrid siga andando con los trabajadores a la cabeza", ha sentenciado. La próxima cita, el 9 de septiembre en Vistalegre, donde los delegados de UGT y CC.OO. se pondrán en contacto a 20 días de la huelga.