El líder de los empresarios europeos rechaza los "proteccionismos" y defiende las adquisiciones empresariales entre los países de la UE
MADRID, 4 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la patronal europea (Unice), Ernest-Antoine Seillière, cree que el retraso que lleva Europa en la consecución de la agenda de Lisboa debe aplazar el objetivo de lograr que la economía europea lidere el conocimiento, el crecimiento y el empleo en 2010.
En una entrevista concedida a Europa Press, Seillière denunció que "se han perdido cinco años" para poder avanzar en estos objetivos, y afirmó que sólo en 2005 se dejó sentir una tímida reacción por parte de los gobiernos europeos ante los retos de Lisboa.
Fue entonces cuando se acordó diseñar programas nacionales que, mediante las reformas necesarias, permitieran dar pasos hacia lo marcado en la agenda de Lisboa. En España, este programa, denominado Plan Nacional de Reformas, ha sido coordinado por el director de la Oficina Económica del Gobierno, Miguel Sebastián.
Para el presidente de la patronal europea, el compromiso de presentar dichos planes supuso un importante avance y una muestra de que Europa estaba tomando "conciencia política" sobre la necesidad de cumplir las metas que se fijaron en la Cumbre de Lisboa del año 2000.
No obstante, Seillière destacó que es necesario "avanzar más", pues esa "toma de conciencia" se ha producido en un momento de gran confusión para la organización de Europa. "Nos preocupa mucho el no poder organizarnos para llevar a cabo esta agenda", añadió.
LA AMPLIACIÓN, BUENA PARA EUROPA.
Preguntado por el proceso de deslocalizaciones que se están produciendo en Europa hacia los nuevos países de la Unión, el presidente de los empresarios europeos quiso dejar claro que las consecuencias del proceso de ampliación de la UE han sido "globalmente positivas" para Europa.
"Se desinformaría muchísimo si se dijera que ampliación es igual a deslocalización. Esa simplificarlo todo. En Unice tenemos dificultades para hacer ver que la ampliación de la UE es globalmente favorable para la economía europea", aseguró Seillière, que destacó además que la incorporación de nuevos países ha generado grandes oportunidades de inversión para las empresas europeas.
Asimismo, recordó que, según el balance que ha hecho la propia Comisión europea, las deslocalizaciones sólo han reducido la creación de empleo en 1% dentro de los Quince, un porcentaje que calificó de "ínfimo" teniendo en cuenta el volumen de empleo que se genera en Europa.
En cualquier caso, Seillière subrayó en que está en manos de los gobiernos nacionales y de la UE el "contrarrestar" los efectos negativos de la deslocalización, facilitando el reciclaje de los trabajadores y el desarrollo de las regiones afectadas.
NO AL PROTECCIONISMO EN LAS OPA'S.
Por otro lado, y en relación con la OPA de E.ON sobre Endesa y la actuación en el caso del Gobierno español, el presidente de los empresarios europeos rechazó los "proteccionismos" y defendió las alianzas y adquisiciones entre países europeos, no sólo como algo normal, sino también "deseable".
"No pueden establecerse medidas proteccionistas. No lo permiten los Tratados y va en contra de la construcción europea. La Comisión y el Tribunal de Justicia de la UE disponen de todos los medios para impedir estas situaciones", añadió Seillière.
El líder de Unice, patronal a la que pertenece la CEOE, afirmó además que Europa debería compartir una mentalidad colectiva para que los países integrados en la misma no vieran la intervención de otro Estado en un negocio nacional como algo negativo, sino como un asunto favorable para construir empresas competitivas a nivel mundial.
"Estamos en contra del proteccionismo. Hay que aceptar el acercamiento, las adquisiciones y alianzas entre las sociedades europeas, no sólo como algo normal, sino como algo deseable", concluyó.
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