MADRID, 13 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMC) considera que la contratación pública actual presentan "claras carencias" regulatorias, como las "elevadas barreras" de entrada, especialmente en el acceso a las concesiones, la multiplicidad de órganos de contratación, la heterogeneidad de procedimientos, escasez de operadores en ciertos sectores, ausencia de control tras la contratación, escasez de motivación del empleado público y dispersión normativa.
Estas son los principales problemas que observa el dictamen de la CNMC sobre los anteproyectos de ley de contratos del sector público y de contratos en sectores especiales aprobados por el Gobierno, donde considera esencial contar con un normativa de contratación pública que favorezca la competencia efectiva en un sector que representa aproximadamente el 18,5% del PIB en España.
La CNMC valora positivamente algunos aspectos de los anteproyectos como la eliminación del procedimiento negociado por razón de la cuantía, la apuesta por la contratación electrónica, el aumento de la transparencia o la asunción del ciclo de vida de los contratos.
Sin embargo, recomienda abordar una modificación "más ambiciosa", que exceda la mera transposición de las directivas europeas y que contemple, entre otras cosas, una reducción de la regulación "excesivamente administrativizada" y que se introduzcan incentivos para maximizar la concurrencia de operadores. Para ello, indica que sería interesante tomar en consideración las prácticas de los operadores en el sector privado.
INCENTIVOS PARA MEJORAR LA EFICIENCIA.
También considera necesario dar relevancia al principio de eficiencia en la gestión de los fondos públicos por parte de los poderes y de las entidades adjudicatarias, de tal manera que propone crear incentivos para los poderes adjudicadores y para los empleados públicos para que se vincule la disponibilidad presupuestaria futura de los primeros a la consecución de buenos indicadores de eficiencia para los segundos.
En este sentido, propone también una evaluación ex ante y ex post de los procesos de contratación, y añade que la CNMC podría colaborar en esta función, teniendo en cuenta indicadores de competencia efectiva y eficiencia, al tiempo que apuesta por introducir en los contratos públicos objetivos secundarios, como son los sociales y medioambientales.
CONTROLAR MEJOR LAS AYUDAS DE ESTADO.
Igualmente, pide tener en cuenta la normativa sobre ayudas de Estado y, para ello, propone exigir información sobre la recepción de todo tipo de ayudas a quienes presenten ofertas anormalmente bajas y además evaluar la posible existencia de ayudas y su compatibilidad con el Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea en los casos que existe riesgo específico de la presencia de las mismas.
Por último, la CNMC afirma que es preciso mejorar los mecanismos de detección de colusión en la contratación pública, poniendo en marcha medidas efectivas en materia de formación, revisión, cooperación administrativa y recursos. En este sentido, indica que el anteproyecto de contratación en sectores especiales debería incluir una obligación de comunicar los indicios de colusión a la CNMC, como en los contratos del sector público.
Sobre el anteproyecto de sectores especiales, el dictamen considera que la CNMC debería tener un papel "preponderante" en el procedimiento para la exclusión de determinadas actividades del ámbito de aplicación de la ley sobre la base de que este organismo ya ha alcanzado un funcionamiento suficientemente competitivo, aunque la decisión final corresponda a la Comisión Europea.
