MADRID, 12 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Servicio de Estudios de La Caixa (La Caixa Reseach) ha alertado de los posibles riesgos que podrían hacer "descarrillar" la recuperación económica, como el "deterioro" del bajo nivel de precios y la moderación salarial, que sería "una traba" para mejora económica.
En un documento recogido por Europa Press, La Caixa asegura que el primer riesgo de la recuperación está en el entorno financiero, que depende de la política del Banco Central Europeo (BCE) y la percepción que tienen los inversores internacionales sobre el riesgo de invertir en activos españoles.
En este sentido advierte de que un "cambio drástico" de apetito frente al "riesgo España" siempre "es una amenaza potencial", aunque admite que las condiciones financieras se han relajado gracias a las reformas nacionales y a la actuación del BCE y que se mantendrán laxas en el futuro.
Ante esta amenaza, considera "deseable" tomar las "máximas cautelas" y continuar disminuyendo los niveles de endeudamiento del país, sobre todo del sector público, para situarlos en cotas más "moderadas y sostenibles".
El segundo gran riesgo para la recuperación, según la entidad, tiene que ver con la inflación y los salarios. En este sentido, asegura que el vigor de la recuperación certifica que es posible crecer y generar renta en un marco de estabilidad de precios y salarios, que contribuye a mejorar la situación competitiva del país.
"Un deterioro en este renglón sería una traba para esta recuperación, ya que la mejoría económica no sería sostenible ante un quebranto del equilibrio exterior del país", sostiene.
A su parecer, cuando la economía ha crecido con fuerza, el sector exterior ha entrado rápidamente en déficit, por lo que el reto es conseguir "no volver a las andadas" y "no dejarse engañar por espejismos". "Sería un grave error caer en la complacencia si esos resultados positivos enmascarasen un deterioro de la posición competitiva del país", advierte.
Pese a estos riesgos, La Caixa asegura que la recuperación se confirma mes a mes y sostiene que el PIB crecerá un 2,5% en 2015, aunque admite que el vigor de las últimas semanas llevará seguramente a una revisión al alza de las previsiones.
