MADRID, 1 Jun. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, aseguró hoy que si el Gobierno da empleo a los 4,6 millones de personas que actualmente se encuentran en el paro el déficit se reducirá "inmediatamente" porque pasarán a cotizar en el impuesto de la renta y pagarán el IVA al poder consumir.
"Creo que nuestro objetivo no es luchar contra el crecimiento del desempleo, es que los 4,6 millones de españoles que no tiene empleo estén empleados porque si ellos consiguen el empleo se reducirá el déficit inmediatamente", afirmó Aguirre durante la inauguración del Congreso de Adefam.
La jefa del Ejecutivo madrileño manifestó que si se da trabajo a estas personas "que hoy cobran un subsidio" en poco tiempo "pasarán a cotizar en el impuesto de la renta y a pagar el IVA porque podrán consumir". "Además de garantizarles el primer derecho social, que es el derecho a tener un empleo, tendremos el objetivo de reducir el déficit", apuntó.
También destacó que la principal misión de los gobiernos es fomentar la creación de empleo, que es la "primera y principal política social en tiempos de crisis" y resaltó que los empresarios contribuyen a este fin con su actividad "muchas veces criticada por quienes son incapaces de crear un solo puesto de trabajo".
Asimismo, recalcó que otro de los objetivos de los gobiernos es suprimir las trabas y reducir las barreras para ayudar a los empresarios a dar un impulso a sus actividades, además de garantizar la estabilidad política, institucional y social necesaria para ello, algo que se consigue, a su entender, con austeridad en el gasto público y con presupuestos equilibrados.
MEDIDAS ORTODOXAS
En este punto, insistió en que en la Comunidad de Madrid se ha procurado poner en práctica la "ortodoxia" en el campo económico hasta donde han permitido las competencias. Así, se han eliminado consejerías, direcciones generales y cargos de confianza, entre otras cosas, y se han podido ahorrar 550 millones de euros.
No obstante, consideró que esto "no es suficiente" y la Administración regional tiene que seguir "apretándose el cinturón", no sin antes destacar que Madrid es la única comunidad autónoma que cumple con los requisitos de déficit impuestos en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), razón por la que no tiene que presentar plan de saneamiento.
Haciendo un repaso por las medidas que han tomado en materia fiscal, recordó que su Gobierno fue el primero en suprimir el impuesto de sucesiones y donaciones, "una decisión imitada por otras comunidades autónomas", además de ser pionera en rebajar un punto en el tramo autonómico del IRPF.
También indicó que Madrid fue la primera en eliminar el impuesto de Patrimonio. En este punto, manifestó que "si el Gobierno de la nación acabó suprimiendo" este tributo fue porque la Comunidad de Madrid se decidió a ello. "Para ser totalmente justa, diré que fue mi adversario político, Tomás Gómez, quien me lo propuso y yo inmediatamente lo puse en práctica", agregó.
Otra de las medidas que ha tomado el Ejecutivo madrileño ha sido la modernización de los horarios comerciales porque, según Aguirre, ya no existe el consumidor que iba al mercado "porque no tenía otra cosa que hacer".
"Hemos dado plena libertad para invertir y desinvertir en Madrid porque creemos que las barreras que se ponen de salida funcionan también como barrera de entrada. Hemos tenido la inmensa suerte que con la que está cayendo prácticamente no ha habido deslocalizaciones porque no hemos puesto barreras de salida", explicó.
Finalmente, destacó que, gracias a todo este tipo de medidas, la Comunidad de Madrid resiste mejor que el conjunto de España la crisis, teniendo una tasa de paro cuatro puntos inferior a la nacional y recibiendo el 65 por ciento de la inversión extranjera, entre otras cosas.
Sin embargo, lamentó que el margen del que dispone el Gobierno autonómico para orientar la política económica es más bien reducido, ya que "toda la legislación básica en materia laboral, fiscal y administrativa debe tomarla el Gobierno de la nación", por lo que reclamó reformas estructurales.
