MADRID, 5 May. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea ha publicado este lunes sus previsiones económicas para 2014 y 2015 que dibujan una España en la que mejora el PIB, gracias en parte al impulso de la demanda interna, aunque con una tasa de paro que, pese a reducirse, "seguirá siendo alto" y una deuda pública en aumento.
Tal como se ve en el siguiente gráfico, según las últimas previsiones de Bruselas, el PIB de España crecerá este año un 1,1%, casi en línea con la media de la eurozona (1,2%), y superará ampliamente en 2015 el promedio de sus socios del euro, con un crecimiento del 2,1% frente al 1,7% de los países del euro.
Esta mejora del PIB se deberá en parte a la recuperación de la demanda doméstica, que tomará el relevo de las exportaciones como principal motor de crecimiento, tal y como se ve en este gráfico.
A pesar de esta mejora, el paro seguirá siendo "elevado" y permanecerá la "moderación salarial", que permitirá, según Bruselas, una ligera reducción adicional de los costes laborales unitarios y mejoras de la competitividad durante los próximos dos años.
En el siguiente gráfico se puede ver cómo el coste laboral unitario nominal, un indicador económico que mide la remuneración de los empleados en relación al PIB, ha caído en España en los últimos años y permanece por debajo de la media de los socios europeos.
En cuanto al paro, Bruselas ha pronosticado que el paro "seguirá siendo alto", con una tasa del 25,5% este año y del 24% en 2015.
Estas cifras suponen una mejora respecto a la última previsión de Bruselas, pero son peores que las que presentó el Gobierno la semana pasada en su cuadro macroeconómico (24,9% y 23,3%, respectivamente). En comparación con la media de los socios europeos del euro, la tasa de desempleo española continúa siendo elevada.
En cuanto al estado de las cuentas públicas, Bruselas pronostica que la deuda pública seguirá aumentando en 2014 y 2015. En el gráfico se aprecia cómo la deuda pública española se ha disparado en los últimos años desde un 61,7% del PIB en 2010 al 103,8% del PIB previsto para 2015.
Mientras, la mejora de las previsiones económicas y los ajustes ya adoptados por el Gobierno harán que el déficit público se reduzca este año, gracias sobre todo a un menor gasto, hasta el 5,6% del PIB (en lugar del 5,5% que calcula el Gobierno, pero por debajo en todo caso el objetivo del 5,8% pactado con la UE).
Si no se adoptan nuevos ajustes, el déficit volverá a dispararse hasta el 6,1% del PIB en 2015, frente al objetivo del 4,2% pactado con la UE. Esta proyección asume que la subida del IRPF aprobada por el Gobierno de Mariano Rajoy en diciembre de 2011 expira a finales de este año.