VIGO, 8 May. (EUROPA PRESS) -
El sindicato CIG ha reiterado este miércoles su rechazo a los traslados que se han efectuado en Pescanova y sus filiales, incluida la llegada a Bajamar Séptima de una docena de técnicos procedentes de Latinoamérica, y ha denunciado que esos movimientos de personal obedecen a "pago de favores por los servicios prestados" y no a razones organizativas.
La central sindical ha recordado que, en las últimas semanas, se ha trasladado 17 técnicos y administrativos de Pescanova a Frivipesca; otros tres trabajadores (incluido el hijo del presidente, Manuel Fernández de Sousa) han sido trasladados a Frinova; y, además, se ha trasladado a Bajamar Séptima, con sede en A Coruña, a dos empleados de Pescanova Alimentación, a uno de Honduras y a otros 11 de las plantas de Nicaragua.
La CIG ha reclamado esta información a través de la Inspección de Trabajo, al entender que esos cambios, con la incorporación de personas a estos centros de trabajo, repercuten de forma negativa en las condiciones de viabilidad de los mismos.
Por otra parte, ha confirmado que este jueves se presentará ante el juzgado mercantil de Pontevedra para personarse en el proceso concursal de Pescanova como parte interesada.
Asimismo, en relación con los encuentros mantenidos entre administradores concursales y comités de empresa, en algunos de los cuales estuvo presente el secretario nacional de la FGAMT-CIG, Xosé Fernández Piñeiro, la central nacionalista ha apuntado que los actuales gestores de la multinacional creen que la recuperación de la empresa es posible, y que han destacado, en particular, la buena posición de Frivipesca en el mercado.
