También prepara ayudas para reducir el impacto de las reestructuraciones y para la automoción
BARCELONA, 3 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Generalitat pondrá en marcha "en 15 días" la línea de avales del Institut Català de Finances (ICF) para circulante de empresas que tengan problemas para conseguir financiación pero sean viables, según anunció hoy el conseller de Economía y Finanzas, Antoni Castells, en una intervención en la Comisión de Economía, Finanzas y Presupuesto del Parlament --que contó con el ex presidente Pasqual Maragall como oyente--.
Esta medida, que fue anunciada por el Govern antes de Navidad, empezará a ejecutarse este mes, y forma parte del paquete de 61 medidas anticrisis de la Generalitat. Castells también prevé ejecutar a partir de marzo una nueva línea de avales para créditos de circulante de hasta 500.000 euros por operación.
Para este mes o principios de marzo está previsto que el Govern empiece a dar garantías a las entidades financieras para que concedan préstamos a los compradores de vivienda protegida, comprometiéndose a comprar los pisos de quienes no puedan pagar más adelante, y poniéndolos de nuevo a la venta como VPO.
También está ultimándose la firma entre el ICF y la Conselleria de Medio Ambiente y Vivienda con el Ministerio de Vivienda para poner en marcha una línea de crédito de 100 millones de euros para financiar promociones de viviendas de alquiler protegido.
Además, a partir de marzo-abril, el Incasòl facilitará el acceso a suelo de su propiedad a las empresas, otorgándoles a su favor un derecho de superficie a largo plazo.
REESTRUCTURACIONES Y AUTOMOCIÓN
La Generalitat augura que para mediados de este mes se ponga en marcha el protocolo previsto en el Acuerdo Estratégico de la Economía catalana para acompañar a empresas y trabajadores con el objetivo de reducir el impacto de reestructuraciones, dotado con cinco millones de euros.
Respecto al sector de la automoción, próximamente se ejecutarán ayudas como cinco millones para implantar tecnologías a través de los centros tecnológicos; la aceleración de la puesta en marcha del centro EPCat de Martorell para formar a 1.400 personas al año en automoción --y que supondrá una inversión de 10,3 euros--, y el apoyo a la diversificación de mercados y la entrada en nuevos sectores -con 1 millón de euros de la línea ICF Internacionalización--.
El presidente del Ejecutivo catalán, José Montilla, dijo hoy que dos tercios de las medidas están en fase avanzada de ejecución, y suponen movilizar unos 7.750 millones de euros, cifra que equivale al 3,5% del Producto Interior Bruto (PIB) catalán.
Del total, 4.400 millones son créditos del Institut Català de Crèdit (ICF) y avales para el fondo de titulización de activos; 3.000 millones, gastos e inversiones directas de la Generalitat; y 350 millones son por el ahorro que se estima conseguir con distintas medidas de austeridad presupuestaria y simplificación regulatoria y administrativa. Sobre este punto, Castells anunció que las medidas de simplificación administrativa ya han supuesto un ahorro de 228 millones de euros.
CIU PIDE LUCHA PARA MANTENER EL EMPLEO
El parlamentario Jordi Turull (CiU) instó a la Generalitat a liderar una "lucha sin tregua a favor de los ocupados" para evitar que se pierdan empleos, y añadió: "No demos ninguna empresa por perdida. La Generalitat no debe hacer de gestora de ERE, y tramitar y aprobar todos los ERE que se anuncian".
Turull también abogó por "dos frentes" en las medidas anticrisis: uno urgente, para "parar la hemorragia", y otro más a largo plazo.
María Ángeles Olano (PP) lamentó que el Govern ha tomado medidas "de forma tardía" para afrontar la crisis, y que no tomó las medidas necesarias mientras había bonanza para ser "más fuertes" cuando llegasen los malos tiempos.
Castells se defendió diciendo que "nadie tiene la receta" para salir de la crisis, pero que la Generalitat está "actuando desde septiembre del año pasado".
Respecto a la falta de crédito, Castells argumentó que las entidades financieras "han pasado de no valorar el riesgo a exagerar al percepción del riesgo". Sobre este punto, criticó: "No pueden sobrevalorar el riesgo y no hacer su función. No me extraña, si no lo cumplen -dar créditos--, que haya voces que digan que se deberá nacionalizar la banca".
