LISBOA, 31 Jul. (De la corresponsal de EUROPA PRESS, Patricia Ferro) -
El Gobierno portugués aprobó hoy en Consejo de Ministros la preparación de una nueva fase de privatización de la petrolera nacional, Galp Energía, que se realizará a través de la emisión de obligaciones convertibles en acciones representativas de un máximo del 7% del capital de la empresa.
Este anuncio se produce el mismo día en el que el presidente de la italiana Eni advirtió que o lograba controlar el capital de Galp o salían de la petrolera lusa, en la que tienen un 33,33% del capital social.
Esta privatización de un 7% del capital de Galp podría suponer la salida del Estado de la petrolera y que el Gobierno cumpliese su plan de ingresar 900 millones de euros este año con privatizaciones.
El comunicado del Consejo de Ministros señala que el decreto-ley aprobado por el gobierno "aprueba la quinta fase de reprivatización del capital social de Galp Energía" que "se concretizará a través de una emisión por parte de Parpública, Participaciones Públicas, SGPS, S.A. de obligaciones susceptibles de permuta o de reembolso en acciones representativas de un máximo del 7% del capital social de Galp".
El gobierno explica que esa emisión de obligaciones " se realizará mediante la venta directa dirigida a inversores institucionales nacionales o extranjeros".
Debido al mal momento en los mercados de capitales, el Gobierno optó por no realizar una Oferta Pública Inicial y prefirió vender la posición que todavía tiene en Galp a inversores institucionales a través del modelo elegido en las últimas fases de privatización de Energías de Portugal (EDP).
Los principales accionistas de Galp son los italianos de Eni y el empresario portugués Américo Amorín, ambos con una participación del 33%. La estatal Caixa Geral de Depósitos tiene un 1%, pero esta participación tiene poderes especiales, ya que es una "acción de oro" del Estado.
En la última fase de privatización del Galp, el Estado vendió un 23% del capital y recibió más de mil millones de euros.