MADRID, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -
El consejero delegado de Imperial Tobacco, Gareth Davis, ha advertido de que la ley antitabaco tendrá un efecto "devastador" en el sector de la restauración, al tiempo que considera que el momento es "completamente inoportuno" si se tiene en cuenta la recesión económica y el hecho de que la tasa de paro esté próxima al 20%.
"Creo que es un gran error, que podría tener importantes consecuencias para los bares y restaurantes", afirmó el consejero delegado de Imperial Tobacco, propietaria de Altadis.
En este sentido, puso como ejemplo que en Reino Unido más de 4.000 pubs han cerrado y 40.000 personas se han quedado sin trabajo desde que entró en vigor la prohibición de fumar en los lugares públicos hace dos años y medio.
"En España, es previsible que el perjuicio para el sector de restauración pueda ser aún mayor, teniendo en cuenta que hay un número mucho más elevado de establecimientos", señaló Davis en sendas entrevistas publicadas en 'El País', 'Expansión' y 'El Economista'.
Por ello, se mostró sorprendido ante el planteamiento del Gobierno, "especialmente en un periodo de auténticas dificultades económicas", en el que debería centrarse en dar apoyo a las empresas en lugar de proyectar una legislación que pueda ocasionar el cierre de un número notable de establecimientos.
"Cualquier cambio de la legislación actual sería innecesario y desproporcionado", insistió Davis, quien agregó que a todos debería preocupar que el Gobierno siga adelante con sus planes, porque además del impacto económico en bares y restaurantes, asestaría un "gran golpe" a la libertad de elección.
Preguntado por cómo afectarán las nuevas reglas al mercado español en general y al negocio de la compañía en particular, el consejero delegado de Imperial Tobacco afirmó que la repercusión en el negocio es "manejable".
"Según nuestra experiencia, el efecto de las prohibiciones al tabaco en lugares públicos ha sido consistente en todos los mercados; inicialmente, se produce un descenso en el consumo que se suaviza a lo largo del tiempo. En Reino Unido, experimentamos un descenso inicial de alrededor del 4%, que con el tiempo se ha quedado en el 2%", explicó.
Respecto a la subida del IVA en julio y su repercusión en la rentabilidad del negocio de la tabaquera británica en España, Davis afirmó que los fabricantes de cigarrillos suelen repercutir las subidas de impuestos en el cliente final, si bien agregó que cada uno de ellos es responsable de la estrategia de precios de sus propias marcas. "Nuestro objetivo es asegurar que las nuestras sigan siendo competitivas y rentables", dijo.
EL MERCADO NEGRO, ALTERNATIVA A LOS ALTOS PRECIOS.
Asimismo, consideró que encarecer el tabaco no es una buena manera de abordar la incidencia del tabaquismo y afirmó que es un "error clásico" que han cometido muchos gobiernos. "Una vez que los precios empiezan a subir drásticamente, los consumidores recurren al mercado negro en números cada vez mayores. Por eso existe un problema tan grande actualmente con los cigarrillos de contrabando y falsificados", señaló.
Como resultado, según dijo, los menores pueden obtener más fácilmente productos de tabaco, los gobiernos reducen su recaudación fiscal y el medio de vida de los estanqueros se ve en peligro. "Los únicos que se benefician de una política fiscal excesiva son los contrabandistas y los delincuentes", agregó.
Por último, preguntado si será necesario cerrar más fábricas en España si sigue la cruzada contra el tabaco, Davis afirmó que la compañía revisa continuamente su capacidad productiva en todo el mundo con el fin de asegurarse que sigue siendo eficiente y competitiva.
