MADRID, 28 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Instituto de la Empresa Familiar (IEF) aboga por abrir un debate sobre el futuro de la energía nuclear en España que permita definir en el plazo de un año el futuro de esta fuente de generación de energía "sin ambigüedad".
Así consta en el documento de "Reformas claves para la economía española", presentado hoy por el presidente del organismo, Juan Roig, en los Desayunos Informativos de Europa Press.
Roig expresó la preocupación de los empresarios sobre la capacidad de suministro de energía en un futuro próximo, máxime cuando la demanda de energía primaria crecerá en el mundo un 60% entre 2002 y 2030 y se duplicará el consumo de electricidad. Asimismo, recordó que en España, la demanda energética crece anualmente un 6%.
"Es muy importante estudiar todas las alternativas de generación de energía, incluida la nuclear, sin ideas preconcebidas", subrayó Roig.
El IEF propone definir el peso que cada fuente de generación tendrá en el sistema energético español atendiendo a Kioto y a garantizar la máxima competitividad de tejido productivo nacional, así como definir un marco estable y vigente a largo plazo para la fiscalidad de los productos energéticos, tanto a nivel autonómico como estatal.
EXIGIR AVANCES EN LIBERALIZACIÓN EN EUROPA.
En relación a Europa, recomienda exigir avances significativos en los procesos de liberalización de los mercados y en la construcción de redes. El organismo cree que la mayor parte de los recursos públicos en I+D se debe destinar a energías alternativas y a mejorar la eficiencia en los consumos. Entre otras iniciativas, estima que el proyecto internacional de generación de energía mediante fusión nuclear (ITER), la energía solar y la eólica deben considerarse "prioritarias".
También aboga por impulsar una política fiscal que, en lugar de ofrecer compensaciones a los sectores afectados directamente por las subidas del precio del petróleo premie su eficiencia energética y la de los hogares españoles.
En cuanto a la interconexión energética, el IEF defiende el desbloqueo de la aprobación de los proyectos de construcción de las líneas de alto voltaje entre Francia y España, así como impulsar la conexión de la red de gasoductos del resto de Europa con la española.
Por último, sugiere desarrollar una normataiva que impulse la construcción de edificios de bajo consumo energético similar en todo el territorio nacional.
"DESPOLITIZAR EL PROBLEMA DEL AGUA".
En cuanto al agua, Roig afirmó que hay que "despolitizar el problema y estudiarlo en profundidad". El IEF apuesta en este ámbito por la creación de una comisión de estudio independiente presidida por un experto de prestigio que cuente con el visto bueno de los partidos mayoritarios.
Esta comisión debería estudiar cúal es el modelo agrícola que, atendiendo a este problema, debe desarrollarse en el futuro, y mientras tanto deberían aprobarse medidas que cuenten con el apoyo de todos, como el impulso al ahorro y a la eficiencia en el consumo premiándolos fiscalmente; la puesta en marcha de un plan urgente de mantenimiento de infraestructuras que reduzca a un 5% las pérdidas de la red, y lograr el reciclado del 100% del agua recuperable.
Además, se debería diseñar una nueva política de precios, de modo que una vez cubiertas las necesidades de las personas y unos mínimos para garantizar el desarrollo económico, el precio de las reservas restantes se determine por la Ley de la Oferta y la Demanda.
El IEF estima que en el precio se deberían incluir todos los costes, incluidos los derivados del transporte (construcción y mantenimiento de infraestructuras). De esta forma, estima que, indirectamente, una vez analizados objetivamente los aspectos medioambientales a considerar, el propio mercado sería el que determinaría si interesan los trasvases, las desaladoras o una combinación de ambas opciones.
