MADRID, 12 Mar. (EUROPA PRESS) -
El volumen de negocio de las empresas dedicadas a la instalación, mantenimiento y conexión a centrales receptoras de alarmas de sistemas de seguridad se redujo un 8,3% en 2012, hasta los 1.770 millones de euros, según los datos de DBK, filial del Grupo Cesce.
Los sistemas de protección activa contra incendios generaron la mayor parte de la facturación, ya que concentraron el 44,1% del total del negocio, con 780 millones de euros, aunque DBK avisa de que este segmento de actividad tiende a perder peso en el sector.
Les siguieron los sistemas de antiintrusión, con una participación del 31,1% sobre el mercado total, por delante de los circuitos cerrados de televisión, los sistemas de control de accesos y los sistemas antihurto.
Según la filial del Grupo Cesce, la coyuntura económica ha afectado "particularmente" a la instalación de nuevos sistemas, haciendo que su penetración en el valor total del mercado pasara del 59,6% en 2011 al 57,1% en 2012, cifrándose en 1.010 millones de euros.
El número de empresas autorizadas para prestar estos servicios de seguridad se situó a finales de 2011 en 1.159 compañías. DBK señala que, a pesar del "elevado" número de empresas autorizadas, la oferta presenta una "notable y creciente" concentración en el grupo de firmas líderes. En concreto, el pasado año las cinco primeras empresas concentraron el 36% del valor total del mercado.
Para 2013, el informe de DBK concluye que al cierre del año la facturación agregada de las empresas del sector habrá caído alrededor de un 4%.
