DÜSSELDORF (ALEMANIA), 5 Ago. (EUROPA PRESS) -
El fabricante alemán de bienes de consumo Henkel obtuvo un beneficio neto de 143 millones de euros en el segundo trimestre del año, lo que supone más del triple que en el mismo periodo de 2008, cuando sus resultados se vieron lastrados por costes de reestructuración de 256 millones.
No obstante, la facturación del propietario de marcas como Persil, Schwarzkopf o Loctite alcanzó los 3.485 millones de euros, un 5% menos, debido al retroceso de las ventas de la división de adhesivos (-12,9%), que contrarrestó los avances registrados en las unidades de detergentes y cosmética (+4,4% y +1,5% respectivamente).
"Las cuentas del segundo trimestre volvieron a sentir los efectos de la recesión", dijo el presidente de Henkel, Kasper Rorsted, quien detacó los resultados obtenidos por las divisiones de cosmética y detergentes, así como la mejoría experimentada por la unidad de adhesivos respecto al primer trimestre del año.
"Esta evolución es atribuíble a las medidas que fueron puestas en marcha de manera temprana, por lo que estoy firmemente convencido de que 2009 no será un año perdido", añadió Rorsted.
En los seis primeros meses de 2009, Henkel registró un beneficio neto de 260 millones de euros, un 1,1% menos, mientras que su cifra de negocio retrocedió un 1,3%, hasta 6.743 millones.
El grupo alemán recortó su plantilla en un 10% en los seis primeros meses del año, hasta 51.819 empleados, de los que el 81,7% se encuentran fuera de Alemania.
