MADRID, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -
La tendencia alcista de los precios del petróleo, el empeoramiento del déficit comercial y eventuales subidas de los tipos de interés más allá de las previsiones de los analistas pesarán sobre el crecimiento de la economía española, a pesar de que no provocarán una ralentización de la misma, según indicaron hoy el conjunto de expertos que participó en el coloquio 'Observatorio Económico' organizado por la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES).
En la presente edición del Observatorio Económico, el director general del Instituto de Estudios Económicos (IEE) y catedrático de Economía, Juan Iranzo, pronosticó que no se producirá un "hundimiento de la economía española, pero sí una desaceleración" de los actuales ritmos de crecimiento.
Entre los principales riesgos para el crecimiento identificó el empeoramiento del déficit por cuenta corriente, y se mostró preocupado no por el crecimiento de las importaciones sino por el leve incremento de las exportaciones. Esta evolución, según explicó Iranzo, supone que España está financiando la creación de empleos en el exterior.
El director del IEE expuso que otro de los límites para que la economía española continúe creciendo al ritmo actual son los futuros movimientos en el ámbito de la política del Banco Central Europeo (BCE), ya que, como recordó el ponente, la fuerte expansión de la economía española durante los últimos diez años estuvo basada en las condiciones favorables de financiación.
Igualmente, otros de los factores de riesgos son los problemas de competencia interior de la economía española. Entre ellos destacó los costes de transición a la competencial (CTC), en el sector eléctrico, y la evolución de los precios del petróleo que pondrán al descubierto a lo largo de este año las carencias de estructura de demanda energética de nuestro país.
En este mismo sentido, el ex secretario de Estado de Economía y presidente de Lehman Brothers para España y Portugal, Luis de Guindos, predijo un "repunte intenso" de la inflación para los próximos meses, relacionado principalmente con el fuerte ritmo de crecimiento de la economía española y con los precios del petróleo, que tendrá un impacto significativo en la economía mundial, principalmente en Europa y Estados Unidos.
En relación con los principales riesgos para que se mantenga el ritmo de crecimiento de la economía española, De Guindos también se refirió a los tipos de interés y vaticinó que el endurecimiento de la política monetaria en Estados Unidos y en Europa podría ser mayor de lo esperado debido al nuevo repunte de los precios del petróleo y la incertidumbre de su evolución futura, relacionada con las tensiones políticas en países productores.
MERCADO INMOBILIARIO.
Hizo hincapié en que este panorama arroja incertidumbres sobre los países donde el mercado inmobiliario ha protagonizado un papel importante en el dinamismo económico, como Reino Unido, Estados Unidos y España, ya que las condiciones que han favorecido una actividad fuerte en el sector de la construcción se tambalean.
De Guindos también expresó sus dudas sobre la evolución y las posibles consecuencias para la economía de los efectos de la política de tipos de interés bajos, que son atracción del endeudamiento, la caída del ahorro en favor del consumo y el incremento del apetito por los productos de riesgo por parte de los inversores, lo que deja en general, un panorama "con sabor agridulce".
Por su parte, el directo de Fomento del Trabajo Nacional, Joaquín Trigo, mostró su preocupación por la pérdida de competitividad de la economía española y criticó el proyecto de reforma fiscal del Impuesto de Sociedades que el Parlamento debatirá en las próximas semanas, al considerar que la eliminación de las deducciones por inversión de beneficios y por inversión en el extranjero desincentivarán las inversiones de las empresas.
CREDIBILIDAD DE LAS INSTITUCIONES.
Otro de los principales problemas de la economía española expuesto en el 'Observatorio Económico' de la FAES reside en la credibilidad de las instituciones, según explicó el catedrático de Economía Aplicada, Francisco Cabrillo. El profesor declaró que los cambios en el ámbito institucional y regulatorio tienen un escaso coste económico, pero sí producen incertidumbre en las previsiones de los analistas.
Por último, el economista del Estado Alberto Recarte insistió en que los principales problemas de la economía española son la inflación y el déficit de la balanza de pagos, y afirmó que el Gobierno no está haciendo nada para solucionarlos. Además, criticó que tampoco sabe lo que le van a costar sus últimas iniciativas, como la Ley de Dependencia y la Ley de Igualdad, y que la reforma fiscal elaborada por el Ejecutivo obstaculiza que los ciudadanos y las empresas reinviertan sus ganancias en crear más riqueza.
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