AUBURN HILLS (ESTADOS UNIDOS), 18 Abr. (EP/AP) -
El fabricante germano-estadounidense de automóviles DaimlerChrysler sigue considerando como una de sus opciones mantener dentro del consorcio a su filial Chrysler, que se encuentra inmersa en una crisis económica, según indicó el presidente de Chrysler, Tom LaSorda.
El máximo responsable de la firma con sede en Auburn Hills, en el Estado de Michigan, declinó abordar el tema de una eventual venta de Chrysler a otra compañía, aunque la venta es una de las opciones que baraja DaimlerChrysler, después de que el presidente del grupo, Dieter Zetsche, anunciara que todas las opciones sobre Chrysler estaban abiertas.
Sin embargo, LaSorda afirmó que a pesar de que la multinacional germano-estadounidense ha recibido importantes ofertas de compañías como la del fabricante de componentes canadiense Magna, así como de Cerberus y Blackstone y también por parte de Tracinda, entidad que gestiona las inversiones del millonario Kirk Kerkorian, DaimlerChrysler mantiene como una de sus opciones quedarse con su filial dentro del consorcio.
Por otro lado, el presidente de la firma estadounidense se mostró preocupado por la posible pérdida de trabajadores clave de su empresa con motivo de la incertidumbre sobre el futuro de Chrysler. "Sería un estúpido si no estuviera preocupado por la pérdida de empleados", añadió.
Al mismo tiempo, apuntó que el plan de reestructuración que está llevando a cabo la empresa en Norteamérica y que contempla la supresión de 13.000 empleos en la región "está avanzando suavemente" según lo previsto.
LaSorda también destacó la importancia que tiene la reducción de los gastos en seguros sanitarios para retomar la rentabilidad en su empresa en un futuro. Chrysler destina anualmente 2.200 millones de dólares (1.620 millones de euros) a gastos sanitarios de sus 80.000 empleados y prevé gastarse 19.000 millones de dólares (14.000 millones de euros) en esta materia a largo plazo.
En este sentido, aseguró que este asunto será uno de los aspectos principales que se abordarán en la próxima negociación nacional con el sindicato United Auto Workers (UAW). Asimismo, subrayó que en esta negociación jugarán un papel importante las entidades aseguradoras y la Administración.
Por último, resaltó que su compañía está trabajando para recuperar la rentabilidad en 2009, con el lanzamiento de nuevos modelos y con la reestructuración de su negocio en Norteamérica. La firma está inmersa en una crisis económica a causa de las reducidas ventas en la región provocadas por el elevado consumo de carburante de sus modelos y el alto precio de la gasolina.
DaimlerChrysler anunció el pasado 14 de febrero un plan de reestructuración trienal para Chrysler que supone la supresión de 13.000 empleos en Norteamérica entre 2007 y 2009, lo que representa el 16% de su plantilla, con el fin de retornar a la rentabilidad en 2008.
El programa de reestructuración contempla también el cierre de una fábrica y persigue reducir la capacidad de producción instalada en 400.000 unidades.
