MADRID, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los neumáticos de baja resistencia al rodamiento comercializados por el fabricante francés Michelin han permitido ahorrar unas emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera de 22 millones de toneladas, así como reducir en 9.000 millones de litros el consumo de carburante, informó hoy la empresa en un comunicado.
La multinacional gala resaltó que desde que inició la comercialización en 1992 de estos neumáticos 'verdes' ha entregado 570 millones de unidades en todo el mundo, que han ahorrado 22 millones de toneladas de CO2 a la atmósfera, el equivalente a lo que pueden captar 880 millones de árboles al año.
Así, la firma indicó que estos neumáticos de baja resistencia al rodamiento permiten ahorrar cada segundo en todo el mundo 43,9 litros de carburante y 109,14 kilogramos de dióxido de carbono a la atmósfera.
A raíz de estos resultados y con motivo del 15 aniversario del lanzamiento de estas ruedas al mercado, Michelin instalará en Berlín, Nueva York, París y Shanghai, contadores gigantes, que sumarán cada segundo el ahorro de carburante y la reducción de las emisiones de dióxido de carbono que se han logrado con la introducción de los neumáticos de la compañía con baja resistencia al rodamiento.
Michelin indicó que estos contadores mostrarán la disminución del consumo de combustible y de las emisiones de gases de efecto invernadero que se han dejado de emitir a la atmósfera desde que estos neumáticos de baja resistencia al rodamiento fueran lanzados al mercado en 1992.
Estos dispositivos se instalarán en la fachada del Hotel Park Inn Hotel en Nueva York, en Times Square en Nueva York, así como en el embarcadero Suffren al pie en la Torre Eiffel de París y en la torre City Group Mansion en Shanghai.
El fabricante de neumáticos para automóviles apuntó que esta medida se orienta a concienciar a los consumidores de todo el mundo sobre la importancia de reducir las emisiones contaminantes a la atmósfera.
En este sentido, la compañía explicó que la elección del neumático "constituye verdaderamente un gran reto medioambiental", puesto que el transporte por carretera ha sido reconocida "como una fuente importante de emisiones de dióxido de carbono".
