ESTOCOLMO, 3 Ene. (EUROPA PRESS) -
El fabricante sueco de vehículos industriales Volvo ha recibido un pedido de 700 autobuses en la ciudad de Shanghai de la compañía, que tiene una legislación medioambiental que obliga a todos los vehículos de este segmento a cumplir con la normativa medioambiental Euro 3 de emisiones contaminantes, informó hoy la compañía.
En 2005, la 'joint venture' formada Volvo en Shanghai, Sunwin Bus, firmó un acuerdo de colaboración para la venta de 2.000 autobuses urbanos a la empresa china Shanghai Bashi Industrial. Hasta el momento ya han sido entregadas 1.300 unidades.
De esta forma, Bashi ha firmado un nuevo contrato para la entrega de los 700 autobuses restantes. Estas unidades estarán formadas por los modelos B6R y B7R de Volvo, que serán producidos durante la primera mitad de este año.
El chasis de estos autobuses será fabricado en la planta del grupo sueco en la localidad sueca de Boras y serán ensamblados en la factoría de Sunwin Bus en Shanghai.
En materia medioambiental, China sigue la normativa europea sobre emisiones contaminantes en los vehículos. Así, en la actualidad los autobuses que se comercializan en este país deben cumplir con la normativa europea Euro 3.
