Zaplana le dice que es el ministro "de la desigualdad" y Acebes le afea que está negociando los PGE con el partido de la "secesión"
MADRID, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
El vicepresidente segundo y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, rechazó hoy que el Gobierno "se esté gastando la despensa", tal y como le reprocha el PP tras sus últimos anuncios de medidas sociales, y recordó al principal partido de la oposición que cuando gobernó nunca consiguió cerrar las cuentas con superávit.
Solbes, que se sometió hoy a las preguntas en el Congreso del secretario general del PP, Angel Acebes, y de su portavoz parlamentario, Eduardo Zaplana, afirmó que en todo el periodo en que gobernó el PP las cuentas públicas nunca cerraron con equilibrio ni siquiera en 2003, dado que el superávit que presentó el PP fue corregido posteriormente por Eurostat porque no se había consignado ni la deuda del Adif ni de Renfe.
Asimismo, afirmó que los 'populares' se "apropiaban" del superávit de la Seguridad Social, "tema que no parece muy correcto". En cambio, indicó que el actual Ejecutivo ha obtenido superávit en todos los años que ha gobernado y, además, entre 2004 y 2007 la deuda pública del Estado se ha reducido diez puntos. "Si esto es gastarse la herencia recibida, que venga Dios y lo vea", espetó a los 'populares'.
Frente a estos argumentos, Zaplana acusó al ministro de haber presentado unos Presupuestos "que rompen con la igualdad y la solidaridad" entre los españoles, y le afeó que se "atreva" a criticar la herencia recibida por el PP, en referencia a unas declaraciones en las que el titular de Economía afirmaba haberse encontrado "con la despensa vacía".
El portavoz del PP, que aseguró que Solbes ha sido el ministro del "sudoku y de la desigualdad", recordó al titular de Economía que el primer Gobierno del PP tuvo que "corregir" una situación económica "lamentable" que heredó de él mismo. Así, recordó que la tasa de paro se situaba en el 24%, la temporalidad se encontraba en el 35% y el déficit público alcanzaba el 6,6% del PIB.
PEDIR CRÉDITOS PARA PAGAR PENSIONES.
"Este Gobierno tuvo que pedir créditos a los bancos para poder pagar las pensiones, y en sus tres años de ministro de Economía la deuda pública alcanzó el máximo histórico del 68,2% del PIB", reprochó el dirigente del PP, que además pidió a Solbes que "rectifique" y coincida con el presidente del Gobierno, que aseguró, según Zaplana, que la herencia recibida del PP fue "francamente buena".
Solbes respondió que en Economía todos los gobiernos son "herederos" de sus predecesores, y señaló que el Ejecutivo socialista tuvo que afrontar la crisis económica de 1991, adoptando medidas "muy duras" en términos presupuestarios y laborales. Pese a ello, indicó que elaboraron los Presupuestos de 1996, con los que gobernó el PP sin problemas. "Por tanto, no se quejen de la herencia recibida", subrayó.
EL PNV "DESAFÍA" LA LEGALIDAD.
En el 'rifirrafe' con Angel Acebes, el dirigente popular reprochó a Solbes que esté pactando los Presupuestos de 2008 con el PNV, partido que "desafía la legalidad para separarse de España" y plantea un "referéndum ilegal para la independencia".
"Creo que es muy importante que nos aclare si le parece lógico que un Gobierno pacte los Presupuestos con quien simultáneamente plantea un referéndum ilegal para la independencia", le espetó Acebes, que acusó al Gobierno de tomar decisiones que provocan "división e inestabilidad".
El ministro se mostró "preocupado" por la intervención de Acebes y le devolvió la 'pelota' preguntándole si el PP considera que el PNV no tiene legitimidad para para negociar y pactar en el Congreso de los Diputados.
Al margen de esta polémica, el ministro afirmó que los españoles tienen hoy "más trabajo y son más ricos", y defendió las políticas del Gobierno para mejorar el tratamiento de los españoles con rentas más bajas.
En cambio, Acebes indicó que los Presupuestos de 2008 no se han usado "ni para favorecer la igualdad, ni la cohesión ni el bienestar general", sino para intentar "ganar un puñado de votos, generando agravios, desigualdades y enfrentamientos entre territorios". "Este enorme despropósito sólo entraría en vía de solución cuando su principal responsable, Zapatero, deje de ser presidente del Gobierno", concluyó.
