VALENCIA, 26 Sep. (EUROPA PRESS) -
Trabajadores de Ford --unos 2.500 según los sindicatos convocantes y alrededor de 400 según la Policía Local-- se manifestaron hoy en la calles del centro de Valencia para exigir la retirada del expediente de Regulación de Empleo (ERE) propuesto por Ford y que afectaría a unos 600 trabajadores.
La marcha, que se inició a las 11.30 horas de la Plaza de San Agustín y culminó ante el Palau de la Generalitat, se desarrolló bajo el lema 'Ni un sólo despido en Ford'. La protesta fue convocada por los sindicatos minoritarios de la planta de Almussafes (Valencia) --CGT, CCOO-Federació d'Industria y el Sindicat de Treballadors del Metall (STM Intersindical Valenciana)-- mientras que la organización mayoritaria, UGT, no participó en la misma.
Los manifestantes portaron pancartas en las que se podía leer 'Ford y el sector del auto en lucha', 'Sí al empleo, no a los EREs' y 'Ford y la Administración me quiere robar la pensión', al tiempo que entonaban cánticos como 'el ERE de Ford España es una patraña' y 'Camps, escucha, la Ford está de lucha'.
Los sindicatos --que calificaron la repercusión de la manifestación de "muy satisfactoria" a pesar de que ha habido trabajadores que no han acudido por "temor a represalias"-- insistieron en su "rechazo a los planes de dirección de Ford de despedir a 600 empleados porque no hay ninguna justificación" para la reducción de la plantilla.
Por ello, reclamaron que la empresa "rectifique y abra un proceso real de negociación, para garantizar la continuidad del conjunto de la plantilla".
El portavoz de CCOO, Miquel Rosaleny, incidió en que la propuesta de ERE es "precipitada y exagerada" y recordó que en la actualidad ya hay 200 personas que se encuentran en una situación de "despido temporal". De igual modo, subrayó que en la factoría se fabrican 1.500 coches diarios por lo que se preguntó "quién los haría" si se llevan a cabo los despidos.
Asimismo, defendió que se trabaje por una solución "lo menos traumática posible" y, respecto a la posibilidad de que se convoque un paro de 24 horas en la producción si no se consiguen acuerdos, afirmó que es "lo último" a lo que quieren llegar y, por tanto, no se sumarían si no se detectara un "peligro real".
Por su parte, la portavoz de CGT-Ford, Francisca Cuesta, recomendó al director general de Trabajo, Román Ceballos, y a la representación de UGT en Ford que "escuchen la voz de la plantilla y den satisfacción a la justa demanda de empleo estable y mejores condiciones de trabajo".
"Que tantos trabajadores hayan acudido a la manifestación, a pesar de las maniobras de la empresa y los delegados de UGT para hacerla fracasar, confirma que sigue existiendo en Ford un importante colectivo dispuesto a luchar a fondo por sus derechos", aseveró.
"CHANTAJE"
En la misma línea, el miembro de STM Intersindical Valenciana, Paco González, exigió a las Administraciones públicas, tanto a la valenciana como al Gobierno central, que "no cedan al chantaje de la empresa".
Al respecto, recordó que esta firma recibe "numerosas subvenciones públicas que hacen que la planta de Almussafes tenga beneficios empresariales que no revierten ni en la creación de ocupación, ni en la mejora de los derechos laborales y sociales de la plantilla, ni de las empresas auxiliares que le prestan servicio".
Los convocantes de la protesta coincidieron en señalar que la manera "más segura y clara" de abandonar la fábrica voluntariamente es el adelanto de los Planes de Jubilación para los trabajadores de 58 y 59 años. Rechazaron en cambio la posibilidad de bajas voluntarias y aseguraron que "sólo habría unas 60 personas que lo aceptarían".
