MADRID, 26 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno deberá rebajar de forma "sustancial" la cifra de 41 años cotizados para poder jubilarse a los 65 años con el cien por cien de la pensión si quiere lograr un acuerdo en materia de pensiones antes del próximo vienes 28 de enero, cuando el Gobierno aprobará el anteproyecto de Ley, según indicaron a Europa Press en fuentes sindicales.
La vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado, aseguró esta mañana que el Ejecutivo estaría dispuesto a acometer esta rebaja, aunque no concretó hasta donde está dispuesto a ceder, y desde el ámbito sindical se dice que "las propuestas vistas hasta ahora no sirven".
Según los sindicatos, ni siquiera es aceptable establecer un umbral en los 40 años, ya que dejaría fuera a la "inmensa mayoría" de los trabajadores, que no tienen perspectivas de poder completar carreras de cotización tan largas.
Este asunto es clave, toda vez que la aprobación ayer del informe del Pacto de Toledo, incluyendo una enmienda transaccionada entre PSOE y CiU para que la jubilación sea "flexible", ha hecho que el debate ya no gire tanto en torno a los 67 años, sino a los 41 años.
Así, el secretario confederal de Comunicación de CC.OO., Fernando Lezcano, señaló que si el Gobierno acepta una rebaja habrá "con casi toda probabilidad" un acuerdo, pero avisó de que de no alcanzar un pacto en torno a los elementos esenciales de la reforma, entre los que se incluye éste, la confrontación será inevitable.
Las fuentes consultadas han confirmado que, aunque para hoy no hay prevista una reunión formal, los contactos se mantendrán para "explotar" la "vía distinta" que se abrió ayer en el Congreso y que podría hacer pivotar el acuerdo en torno a una horquilla en la edad de jubilación vinculada a los años cotizados que se corresponden con el derecho al cobro de toda la pensión.
Así, las centrales consideran "casi imposible" que las partes puedan alcanzar un acuerdo esta noche, dado lo enconado de las posturas, pero confían en que éste pueda fructificar antes del viernes.
Por su parte, la CEOE que hace una semana entraba por la puerta grande a la mesa de negociación, mantiene silencio, aunque ya ha dejado patente de que está a favor de todo lo que sea alargar la edad de jubilación.
