MADRID, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -
Amigos de la Tierra ha reclamado a las autoridades europeas que suspendan el cultivo de maíz transgénico y las autorizaciones futuras con motivo de la investigación que está desarrollando la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) relativa a la seguridad de los cultivos de maíz genéticamente modificados (GM) en Europa, a raíz del estudio, publicado hasta la fecha, sobre el polen del maíz.
En este sentido, la asociación ecologista ha señalado que la Comisión Europea, "bajo la presión de la industria biotecnológica", está considerando permitir un nuevo cultivo de maíz transgénico. "Se trata del maíz transgénico de Pioneer, conocido como 1507, con dos modificaciones genéticas que le permiten producir una toxina para combatir el taladro del maíz y a la vez ser tolerante al herbicida glufosinato", ha detallado la asociación.
Por ello, tanto Amigos de la Tierra como Testbiotech han escrito al nuevo Comisario de Seguridad Alimentaria de la Unión Europea, Andriukaitis, para solicitarle que se detenga el cultivo de maíz transgénico.
La asociación ha recordado que la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria, en una carta del 16 de diciembre de 2014, anunció una nueva investigación para evaluar la seguridad de todas las variedades de maíz transgénico que se cultivan en Europa en la actualidad o aquellas que están en trámites de ser aprobadas. Así, ha destacado que según el anuncio, estas evaluaciones de seguridad se publicarán antes del 31 de mayo de 2015.
En concreto, Amigos de la Tierra ha detallado que el estudio, que ha reabierto la investigación y el posicionamiento de la EFSA, recopila datos sobre las distancias que puede recorrer el polen del maíz. De este modo, asegura que la EFSA aconseja que la distancia de seguridad entre campos cultivados con maíz transgénico y espacios naturales sea de 20 a 30 metros, sin embargo, el estudio desvela que el polen puede viajar varios kilómetros.
Al respecto señala que, según el estudio, para proteger especies catalogadas como sensibles al insecticida que contiene el polen transgénico, como las mariposas y las polillas, las distancias de seguridad deben basarse en rangos de kilómetros. También destaca que la investigación concluye que las evaluaciones de riesgo previas y las conclusiones relativas a las distancias de seguridad, la exposición potencial, y los efectos sobre los organismos "no objetivo" deben ser revisadas.
Para la directora de Amigos de la Tierra España, Liliane Spendeler, la investigación refleja que "es imposible cultivar maíz transgénico sin provocar graves daños a la naturaleza, así como contaminación transgénica en los campos de cultivo convencionales y ecológicos. "La única conclusión lógica y científica que se desprende es que es necesario detener todo el cultivo de maíz transgénico en Europa", ha añadido Spendeler .