MADRID 2 Abr. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades rusas deben investigar el violento ataque contra el activista ruso de los Derechos Humanos Lev Ponomarev, según la denuncia hecha hoy por nueve organizaciones defensoras de los Derechos Humanos y recogida por Human Rights Watch (HRW) en la que también se pide que se asegure un fin al creciente número de ataques en Rusia contra los activistas defensores de los Derechos Humanos.
Ponomarev, de 67 años, fue atacado y resultó herido de gravedad por varios asaltantes no identificados durante la madrugada del 31 de marzo a las afueras de su apartamento de Moscú. Estas organizaciones --entre las que se incluyen, entre otras, la Fundación Andrei Sajarov, Amnistía Internacional Estados Unidos, la Casa de la Libertad y HRW--, piden al presidente norteamericano, Barack Obama, y otros dirigentes que se reúnan con el presidente ruso, Dimitri Medvedev, que subrayen la necesidad de llevar a los autores del ataque contra Pomarev ante la Justicia.
"No hay duda de que Ponomarev fue atacado debido a su trabajo en relación con los Derechos Humanos", declaró la directora de HRW para Europa y Asia Central, Holly Cartner. "El presidente Medvedev debería asegurarse de que los atacantes de Ponomarev son identificados y juzgados, y que los defensores de los Derechos Humanos son guardados de estos ataques", añadió.
El ataque se produjo mientras Ponomarev volvía a su casa de una reunión con un miembro de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa. Los hombres le dieron una paliza con bastones, señala HRW. Huyeron cuando el conserje de su edificio escuchó los ruidos y se acercó para investigar, tras lo cual Ponomarev fue trasladado hasta un hospital local, donde recibió tratamiento de emergencia y donde permanece en tratamiento por diferentes hemorragias, incluidos los ojos, y por una posible conmoción cerebral.
Ponomarev, director de la organización Za Prava Cheloveka, lleva defendiendo estos derechos casi dos décadas, incluidos los abusos en el sistema de prisiones de Rusia, las violaciones cometidas en el Cáucaso norte, defendiendo los derechos de los menores y los pensionistas, entre muchos otros.
Tanto Ponomarev como su organización han permanecido en repetidas ocasiones bajo presión gubernamental, ha sido juzgado por organizar y participar en manifestaciones y acusado de calumniar a los funcionarios de prisiones por exponer los problemas de los Derechos Humanos en las cárceles.
Ponomarev también había recibido amenazas anónimas. El pasado martes, autores desconocidos modificaron la entrada que tiene en la Wikipedia para predecir que moriría de un ataque. También las semanas anteriores, atacantes rajaron las ruedas de su coche.
Estos ataques siguen a las muertes del abogado defensor de los Derechos Humanos Stanislav Markelov y de la periodista de la 'Novaya Gazeta' Anastasiya Baburova, asesisantos que aún no han sido resueltos, señala HRW. Los ataques regulares contra los defensores de estos derechos fueron debatidos recientemente durante el procedimiento de Revisión Periódica Universal del Consejo de los Derechos Humanos de la ONU, al que Rusia se sometió en febrero de 2009.