Niega avances del régimen en la materia y aconseja al Gobierno español "cuidado" a la hora de valorar el desarrollo del país
BATA (GUINEA ECUATORIAL), 10 (De la enviada especial de EUROPA PRESS, Beatriz Fernández)
La oposición ecuatoguineana ha pedido hoy a España que la mejora de las relaciones bilaterales con Guinea Ecuatorial no se haga "a expensas de los Derechos Humanos" y de la democracia y le ha aconsejado que tenga "cuidado" a la hora de valorar el "supuesto" desarrollo de la ex colonia.
El líder de Convergencia para la Democracia Social (CPDS), Plácido Micó, que ocupa el único escaño de su formación en el Parlamento, se entrevistó esta mañana en Malabo con el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, y la delegación parlamentaria que le acompaña.
Al contrario de la percepción del ministro sobre la existencia de ciertos avances en el régimen de Teodoro Obiang Nguema, Micó alertó, en declaraciones a los medios de comunicación al término del encuentro, que el único país de lengua hispana de África Subsahariana camina hacia un "sistema de partido único de hecho" y señaló que no ha habido mejoras en la situación de los Derechos Humanos en los últimos años.
Como ejemplo, indicó que en Malabo y en Bata, las dos ciudades principales del país donde hay presencia internacional, se han construido nuevas comisarías con sótanos donde se tortura a los detenidos sin peligro de que sus gritos se puedan escuchar en las calles. "Las detenciones arbitrarias, la extorsión y la exclusión social siguen siendo moneda corriente", advirtió.
Micó pidió al ministro y a la delegación parlamentaria que la relación bilateral con Guinea tenga "siempre presente la cuestión que más preocupa a la sociedad guineana, la falta de libertades, de justicia social y de una distribución justa de los recursos procedentes del petróleo", porque, añadió, la relación bilateral que desean con España debe ser distinta a la que Guinea mantiene con China, centrada únicamente en los intercambios económicos.
También le reclamó "cierto cuidado" a la hora de valorar el supuesto desarrollo del país, sólo "por alguna que otra infraestructura" generada por los "enormes recursos que el petróleo procura al Gobierno", porque detrás de este "espejismo" hay miles de familias desahuciadas sin indemnización ni posibilidad de recurso alguno.
Micó, que pidió también al Gobierno español más becas para estudiantes, se mostró convencido de que el presidente Teodoro Obiang Nguema volverá a presentarse candidato en las próximas elecciones, que deberían convocarse para diciembre próximo.
El partido opositor, de corte socialdemócrata, al que representa, entró en el Parlamento en 2004 con dos escaños de un total de cien, pero tras las legislativas de 2008 su presencia se redujo a un asiento, el que ocupa Micó, que subrayó que en 1993, once de los ochenta escaños de la Asamblea pertenecían a partidos de la oposición, por lo que ha habido un "claro retroceso".
EL GOBIERNO VE ESFUERZOS EN EL RÉGIMEN
A pesar de ese retroceso, el Gobierno español pone en valor el "esfuerzo" que cree que ha hecho el régimen de Teodoro Obiang por "mejorar sus estándares democráticos", en palabras de Moratinos, que reconoce, no obstante, que el país aún debe "profundizar" en materia de Derechos Humanos y de apertura democrática
Entre otras señales, Moratinos destaca que el Gobierno ecuatoguineano ha invitado al relator de la ONU contra la tortura y a otras organizaciones internacionales a que visiten sus cárceles, sabiendo que no les iban a poner buena nota; que en la actualidad no practique ejecuciones, a pesar de que la pena de muerte de mantiene en su código penal; o que en esta visita su agenda incluya entrevistas con las distintas fuerzas políticas, lo que no ocurrió en su viaje anterior.
Al margen de la voluntad del Ejecutivo de acompañar a los ecuatoguineanos en un proceso de apertura democrática, el ministro ha viajado a la ex colonia para contribuir a abrir oportunidades de negocio para las empresas españolas. Un fin que ayer le llevó a quejarse ante la enviada especial de Televisión Española por una crónica que había disgustado a algún empresario español porque criticaba la dictadura de Obiang y perjudicaba así los intereses empresariales.
Moratinos, que reconoció que no había visto personalmente la información de la profesional, lamentó durante una conversación informal con los periodistas que le acompañan en este viaje que presten más atención a los informes de los organismos internacionales críticos con Obiang que los síntomas positivos que el Ejecutivo español percibe en el país, sobre todo si se le compara con los países de su entorno.
Esta llamada de atención por parte del ministro se produjo también después de una cena que mantuvo con el primer ministro ecuatoguineano, Ignacio Milam, en la que éste le trasladó que Guinea Ecuatorial se siente maltratada y olvidada por España y que algunas críticas que recibían desde la ex metrópoli no eran aceptables para ellos. El ministro respondió diciendo que Guinea había sido muy paciente con España, según han relatado asistentes a la velada.
Tras su entrevista con Micó y representantes de otras fuerzas políticas que no pertenecen al partido del Gobierno, la delegación española se desplazó a Bata, la capital económica del país, en la región continental, donde Moratinos se entrevistará con el presidente Obiang.
-. Firma: EDU .-