VALLADOLID, 29 Sep. (EUROPA PRESS) -
María Ángeles Medina, la madre de Roberto, un niño con un 100 por cien de minusvalía por parálisis cerebral, tiene serios problemas cada vez que tiene que acudir con su hijo al Hospital Niño Jesús de Madrid a pasar las revisiones correspondientes. Sacyl les ha concedido una ambulancia de transporte individualizado para realizar el traslado del menor desde Valladolid, pero Roberto no puede viajar en ese tipo de ambulancias porque las dimensiones no son las adecuadas.
Roberto utiliza una silla de ruedas rígida adaptada y precisa de una ambulancia con las dimensiones adecuadas para el traslado del niño y de la silla. Además, en declaraciones a Europa Press TV, María Ángeles explicó que "el transporte debe ser individual porque el niño tiene problemas de contagios... y por recomendaciones médicas el niño tiene que ir sólo".
"A veces la ambulancia ha venido llena de gente, otras con otro niño tumbado, la silla del niño... y no hemos podido ir", continuó la madre de Roberto. "Hemos estado en la puerta tres cuartos de hora hasta que ha venido la ambulancia", continuó.
María Ángeles describió el problema que tuvo el día 2 de abril, último día que ha viajado con su hijo a Madrid. "Nos dijeron que venía una ambulancia grande a buscar al niño, nos dijeron que venían a las 7 de la mañana, luego nos dijeron que venían a las 6.30 porque venía más gente en la ambulancia, dijimos que no, que tenía que ir sólo, y la contestación fue que dejásemos la silla en Valladolid y que llevásemos al niño en brazos".
"Al final vino una ambulancia pequeña, así que tuvimos que llamar a un taxi adaptado para poder llevar al niño a Madrid y no perder la consulta, porque si no tardaríamos meses en conseguir otra consulta", recordó.
La suma de la factura del taxi era de 290 euros, como resultado del viaje de ida, el de vuelta, y de la espera, resultado ante el cual, la familia de Roberto decidió pedir al Sacyl el abono de dicha cantidad. Esta reclamación ha sido denegada dos veces.
"El niño una vez ha ido tumbado en la camilla, con la silla volcada encima de la camilla y el niño con las piernas dobladas", explicó María Ángeles. "Por eso nuestra queja es contra el servicio de ambulancias que no está cumpliendo lo que tenemos concedido por el Sacyl", aclaró.
Por otro lado, la empresa que se encarga del traslado del niño aseguró que se está trabajando en unos carros que transportarían este tipo de sillas y que estarían en funcionamiento a partir de noviembre, solución sobre la que la madre de Roberto piensa que "sería la primera vez que hay en España una ambulancia que tira de un carro" y que lo que ella quiere es que "el niño vaya en condiciones".
El 7 de octubre, María Ángeles volverá con su hijo a Madrid. Ella "espera que venga una ambulancia grande y en condiciones".