Actualizado 07/10/2009 19:05

La fiscal mantiene la petición de cárcel para el acusado de dejar morir a su madre en el Raval

Los psicólogos dicen que el hombre dependía de su madre y no afrontaba el problema


BARCELONA, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -

La fiscal mantuvo hoy la petición de cuatro años de cárcel por homicidio imprudente para Marc L.C., juzgado ayer y hoy por dejar morir a su madre de inanición en el piso que compartían en el barrio del Raval de Barcelona. Por su parte, la defensa solicitó la absolución del acusado y defendió que había hecho todo lo posible por atender a su madre.

El suceso tuvo lugar el 15 de mayo de 2006 cuando Carmen L.C., de 56 años, falleció en su piso, que no tenía las mínimas condiciones de salubridad. En el juicio, el forense explicó que la causa de la muerte fue una insuficiencia cardiaca pero la causa de fondo fue la malnutrición. En su comparecencia ante el tribunal, afirmó que la víctima llevaba postrada en el sofá varios días y que su cuerpo presentaba un estado de "desnutrición".

Por su parte, el médico de la defensa atribuyó el fallecimiento a una muerte súbita derivada del alcoholismo que sufría la víctima que le llevó a una malnutrición, porque no absorbía bien los alimentos.

Tras la declaración de los forenses, comparecieron ante el tribunal los psiquiatras judiciales y el que aportó la defensa. Los tres especialistas concluyeron que el acusado no tenía ningún trastorno mental pero sí una personalidad "evitativa y dependiente".

Según la psiquiatra Lluïsa Pujol, en el acusado confluyen diferentes circunstancias que condicionan su personalidad, como la vida en una familia desestructurada y el alcoholismo de su madre. "Estas circunstancias le dificultan tener habilidades para afrontar problemas".

Los psiquiatras aseguraron que Marc L.C. mostraba cierta "sumisión" hacia su madre, que tenía un fuerte carácter, con lo que "una persona así, que evita los problemas cuando hay conflicto, que depende mucho de su madre, poco puede hacer ante una persona bajo una enfermedad alcohólica".

Según los médicos, en las mismas circunstancias y con un empleo fijo otra persona se habría independizado, pero el acusado continuó viviendo con su madre. Los psiquiatras aseguraron que, por su personalidad, Marc L.C. "no era capaz de dar un golpe en la mesa" aunque se diera cuenta de que la situación de su hogar no era la mejor.

Tras las pruebas periciales, la fiscal mantuvo su petición de pena de cárcel. Según la Fiscalía, el acusado "conocía y comprendía" el grave estado de su madre y no tomó medidas para evitar su muerte. La fiscal remarcó que en los diez días anteriores al fallecimiento no llamó a los servicios médicos ni a los servicios sociales.

Por su parte, el abogado defensor detalló las diferentes ocasiones en las que el acusado solicitó la ayuda de los servicios sociales y aseguró que en ningún momento dejó de alimentar a su madre. Además, el letrado se preguntó cómo su acusado podía saber que su madre estaba en peligro de muerte "si los médicos que estuvieron allí unas semanas antes no alertaron de nada".

LA FISCAL SUPERIOR SE DEFIENDE

La fiscal superior de Catalunya, Teresa Compte, aseguró hoy que la Fiscalía no podía intervenir en ese caso, ya que sólo puede hacerlo en caso de que haya delito, que se trate de menores o de incapacitados. Ayer una trabajadora de los servicios sociales declaró que la Fiscalía conocía el caso y hoy la fiscal admitió que el Ministerio Público recibió informes sobre la familia.

En declaraciones a los periodistas tras la apertura del año judicial en Catalunya, Compte dijo que la Fiscalía no es "omnipotente ni lo sabe todo", por lo que no puede actuar siempre. Además, recordó que los servicios sociales no dependen de la Fiscalía.