La Policía detiene en Madrid a un rumano que vendió a una compatriota menor de edad por 2.000 euros para ser prostituida

Europa Press Sociedad
Actualizado: viernes, 19 octubre 2007 17:01

MADRID 19 Oct. (EUROPA PRESS) -

Agentes del Grupo de Localización de Fugitivos de la Policía Nacional han detenido en Madrid a un hombre de nacionalidad rumana reclamado por las autoridades judiciales de su país, que le acusan de haber vendido a una compatriota menor de edad por 2.000 euros para ser explotada sexualmente.

Según un comunicado del Ministerio del Interior, el detenido responde al nombre de Sandu P., de 35 años y natural de Peretu (Rumanía), aunque en el momento de su detención portaba una carta de identidad y un permiso de conducir falsos a nombre de otra persona de su misma nacionalidad. Además, sobre el detenido pesa una Orden Europea de Detención y Entrega, emitida por las autoridades judiciales rumanas, por un delito de prostitución e inmigración ilegal.

En enero de 2002, Sandu, perteneciente a una organización dedicada a la explotación sexual, reclutó a una menor rumana a la que facilitó un pasaporte, así como una cantidad de dinero, para después trasladarla a España. Posteriormente, la víctima fue vendida por el detenido, por la cantidad de 2.000 euros, para ser explotada sexualmente.

UN ALEMÁN DETENIDO EN ESTEPONA.

Por otro lado, agentes del Grupo de Localización de Fugitivos y de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) de la Comisaría de Estepona han detenido a Lars Roland H., de 30 años y natural de Dohna (Alemania). Sobre él existe una reclamación internacional, emitida por las autoridades judiciales alemanas, por un delito de obstrucción a un procedimiento de insolvencia y bancarrota grave.

Durante los años 2002 y 2003, el detenido asumió para sí una cantidad de dinero de al menos cinco sociedades anónimas alemanas sobre las que habían sido dictadas medidas de insolvencia. Asimismo, en agosto de 2002, constituyó su propia empresa en Marbella (Málaga) y figuró como director administrativo de otras cinco compañías mercantiles. Posteriormente presentó solicitudes de insolvencia para estas seis últimas empresas y destruyó los registros de contabilidad y los balances, reteniendo todos los pagos.

Contenido patrocinado