MANAGUA, 30 Abr. (Reuters/EP) -
El Gobierno nicaragüense decretó ayer la "emergencia sanitaria" durante los próximos 60 días, en los que las autoridades intentarán conseguir 20 millones de dólares para adquirir medicamentos y tratar de prevenir la propagación de la gripe porcina que podría haber provocado ya 176 muertes en México.
El presidente Daniel Ortega leyó y firmó el decreto, transmitido también en los medios de comunicación estatales. El mandatario de Nicaragua explicó que la medida busca "impulsar las acciones necesarias para la prevención, control y mitigación de la epidemia".
"Estamos formalizando esta situación de emergencia por un período de 60 días y aquí lo más importante es que nos unamos todos los nicaragüenses para enfrentar esta crisis", apuntó Ortega, preocupado porque los casos de gripe porcina, extendidos por varios países iberoamericanos, se den también a Nicaragua.
Por otra parte, el ministro de Salud, Guillermo González, recomendó a la población evitar las aglomeraciones. El objetivo, explicó, es evitar que haya "el vehículo" de transmisión, dado que el virus se contagia por el aire.