Paulino Rivero pide una sola voz de las regiones europeas para afrontar una política europea de inmigración

SANTA CRUZ DE TENERIFE 30 Oct. (EP/IP) -

El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, trasladó la necesidad de que las regiones europeas hagan oír su voz de forma unánime, "articulando un mensaje claro, único y sólido para, una vez vertebrado, hacerlo llegar a los escenarios de decisión de la Unión Europea", durante la inauguración de la primera Conferencia Europea sobre "El papel de las regiones y ciudades en la gestión de los flujos migratorios", en Adeje, Tenerife.

En el acto de apertura participaron también el presidente del Comité de las Regiones, Michel Delebarre, el presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales del Comité de las Regiones, Antonio Paiva, el presidente del Cabildo de Tenerife, Ricardo Melchior y el alcalde de Adeje, José Miguel Rodríguez Fraga.

Paulino Rivero agradeció al Comité de las Regiones de la Unión Europea que haya elegido Canarias para celebrar este encuentro. Una elección que desde su punto de vista "no es casual, ya que estamos en unas islas a mitad de camino entre tres continentes. Unas islas que saben de idas y vueltas, de partidas y de regresos y de búsquedas de horizontes".

Según Rivero, es necesario que "la inmigración irregular se inscriba en un plan de acción amplio del que todos nos sintamos responsables. Un plan de acción que abarque aspectos como la cooperación con los países de origen y tránsito, medidas de seguridad y control en el Atlántico y otras para regular los flujos". En este sentido, el presidente canario destacó la posibilidad de establecer cupos para trabajadores extranjeros, "algo que el Gobierno de Canarias considera procedente y aconsejable".

Paulino Rivero asegura que esta propuesta se concreta en "la oportunidad de ofrecer cupos de trabajos temporales para que los inmigrantes no se dirijan a los cayucos sino a los consulados". Estas ofertas de trabajo permitirían que los inmigrantes lleguen a España o Europa de forma legal y regulada".

Para respaldar esta propuesta, el presidente canario detalló que en junio de 2007 los extranjeros afiliados a la Seguridad Social en España ya sobrepasaban los 2.000.000 y en Canarias se acercaban a 100.000. Por lo que "con estas cifras, barajar cupos de entre 50.000 y 100.000 trabajadores acogidos a una iniciativa de estas características supondría un esfuerzo mínimo para los países de acogida y una solución sólida para los países de origen de inmigración irregular", aseguró Rivero.

El presidente del Gobierno de Canarias también ha querido dedicar parte de su intervención a analizar el asunto de los menores inmigrantes. Rivero asegura que se trata de "jóvenes a los que hay que acoger, puesto que no se les puede aplicar las medidas de repatriación vigente para mayores". Pero además, los esfuerzos del Gobierno autonómico no acaban en la acogida y la asistencia sino que "hay que volcarse en todo lo que atañe a educación, formación e integración de los chicos". Para afrontar ese asunto, Paulino Rivero ha pedido especial sensibilidad y solidaridad por parte de todos, especialmente, por los estados miembros de la Unión Europea, sin eludir responsabilidades, ya que se trata de un asunto de Estado.

Por su parte, el presidente del Comité de las Regiones, Michel Delebarre, ha afirmado que la Unión Europea debe tener en cuenta los componentes y repercusiones del fenómeno complejo y multidimensional de la inmigración. Delebarre asegura que "nos encontramos en una situación de urgencia y que las políticas de inmigración deben tratarse con anticipación y planificación". Por esta razón, la inmigración será una prioridad de las políticas de la Unión Europea en el año 2008.