MADRID, 31 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los tribunales españoles enjuiciaron en 2015 las muertes de nueve niños a manos de sus progenitores y dictaron ocho sentencias condenatorias --una se corresponde al fallecimiento de dos niños--, según el último informe del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial.
El estudio, publicado este viernes 31 de marzo, se centra en un total de 47 sentencias dictadas en 2015 --38 por violencia de género y 9 por violencia doméstica-- por los tribunales del Jurado y las audiencias provinciales.
En cuanto a los casos de muerte de menores por sus progenitores, uno más que en 2014, la calificación penal de los hechos fue, en su mayoría (seis casos) de asesinato, mientras que en los dos restantes fue de homicidio imprudente. Concretamente, estos últimos responden a dos mujeres que dieron a luz solas y no atendieron a los recién nacidos causándoles la muerte.
En total, son nueve autores de asesinato y homicidio de nueve menores, de los que cinco son niños y cuatro niñas. Uno de los casos se atribuye criminalmente la muerte de una niña a los dos progenitores; en cuatro a la madre de los menores, del que destaca el caso de la mujer que mató a su hija de 11 años y su hijo de 9; y en otros tres a un hombre, padre o pareja sentimental la madre.
El estudio indica que la madre que mata a los dos hijos se encontraba sumida en una depresión, según la sentencia, y soportaba desde hacía bastante tiempo una situación del maltrato por parte de su exmarido y padre de los niños y una situación económica muy precaria fruto del abandono del progenitor y expareja.
En los casos en los que la autoría corresponde al padre biológico, una de las sentencias recoge que lo hizo con la intención de hacer daño a su expareja y madre del niño, después de que ésta manifestara su intención de poner fin al matrimonio. Asimismo, en dos casos en los que el autor del crimen es la pareja de la madre, los niños tenían 11 meses y tres años y la relación de los autores con las madres no superaban los cinco meses.
A los nueve autores se impuso la pena de cárcel, que, en el caso de las mujeres que cometieron sendos homicidios al abandonar a sus recién nacidos, oscilaron entre los dos años y medio y los dos de prisión, mientras que a los siete acusados de asesinato la pena osciló entre los seis y los 23 años, siendo la media de 15 años y cuatro meses.
En cuanto a las medidas adicionales, solo en uno de los casos se impuso la privación de la patria potestad a uno de los progenitores, igual que el año anterior. Se prevé que en el próximo informe este tipo de decisiones judiciales afecte a más casos con la aplicación de la Ley Integral de Protección de la Infancia, en vigor desde finales de 2015, que obliga al juez a cerciorarse de en qué situación se quedan los hijos y adoptar medidas de carácter penal y civil para protegerles.
VIOLENCIA DE GÉNERO
El Informe ha analizado 38 resoluciones de violencia de género, de las que 36 resultaron condenatorias --29 por asesinato y 7 por homicidio--, falleciendo como resultado de estos crímenes 39 mujeres. Mientras que en 2014 la media de la pena de prisión en asesinatos machistas fue de 18 años, en 2015 la media de las penas impuestas ha aumentado hasta los 20 años de cárcel.
El informe destaca igualmente la reducida o nula afectación de alteraciones psíquicas y de consumo de alcohol en los autores de crímenes de violencia de género, mientras que alerta sobre el porcentaje de entrega voluntaria del autor, lo que demuestra que se beneficia de la atenuante del artículo 21 del Código Penal, cuya supresión para supuestos de violencia de género viene reclamando el grupo de expertos que realiza este estudio.
Con respecto a años anteriores, aumenta el porcentaje de crímenes en situaciones en que se mantenía la relación de afectividad o convivencia de la pareja, que en 2015 sucedió en el 76 por ciento de los casos. Además, un 73 por ciento de las víctimas tenía hijas o hijos hasta un total de 37, de los que 23 eran menores de edad y 10 de ellos tenían menos de diez años. En cuatro casos estos menores fueron testigos del homicidio o asesinato de su madre.
Los autores pone un especial énfasis en el reducido porcentaje (menos del 3%) de denuncias previas en los crímenes de género analizados, "lo que evidencia el ocultamiento de las víctimas de estos hechos de maltrato previos al crimen y la creencia o confianza de que acabarán cesando".
NUEVE CONDENAS POR VIOLENCIA DOMÉSTICA
El informe también analiza las nueve sentencias que se dictaron en materia de violencia doméstica, todas ellas condenatorias, seis por asesinato y tres por homicidio. La autoría de estos crímenes se atribuyó en seis casos a una mujer, pareja o expareja de las víctimas mortales y en tres casos a un varón, también pareja o expareja de la víctima.
Todas las víctimas eran españolas y en cinco casos mantenían una convivencia afectiva con sus asesinos. La media de las penas de prisión impuestas por asesinato en violencia doméstica fue de 15 años y siete meses.
