MADRID, 4 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha elaborado una encuesta sobre la situación del sistema educativo en el centro y el sur de Somalia que revela que casi el 16 por ciento de las escuelas no pueden dar clases por la falta de fondos económicos, la inseguridad o porque están siendo utilizadas como refugios para personas desplazadas.
En un comunicado, UNICEF ha indicado que su estudio revela que cientos de miles de niños afectados por la crisis humanitaria no reciben apoyo alimentario en las escuelas aunque también reconoce que se han realizado esfuerzos internacionales en inversión para dar servicios esenciales en las escuelas a más de 400.000 niños en 1.900 centros educativos.
El personal de las escuelas que ha participado en la encuesta de UNICEF ha reconocido que entre sus prioridades está el reparto de comida en las escuelas, las transferencias de dinero y la distribución de raciones de comida para llevar a casa.
Sin embargo, el estudio de la agencia de Naciones Unidas revela que sólo el 13 por ciento de las escuelas consigue proporcionar algún tipo de asistencia alimentaria, lo que, a juicio de UNICEF, "supone una oportunidad perdida para hacer frente a la hambruna a través de las escuelas, apoyando a los estudiantes y sus familias".
Otras prioridades en materia educativa son la construcción y rehabilitación de aulas y la puesta en marcha de un programa de incentivos para apoyar a los docentes debido a que el personal de las escuelas recibe salarios muy bajos.
La encuesta de UNICEF muestra que 93 escuelas y centros educativos están siendo en la actualidad utilizados como refugios para personas desplazadas, por lo que no pueden impartir clases a sus alumnos. UNICEF ha subrayado que "el hecho de que las clases no hayan podido reanudarse en el nuevo curso académico y que las instalaciones educativas sean utilizadas como refugio para personas desplazadas, ha deteriorado el ya débil sistema educativo de Somalia, donde 1,8 millones de niños de entre 5 y 17 años no puede ir a la escuela, una situación que ya existía incluso antes del inicio de la crisis actual".
A pesar de la mala situación del sistema educativo, en las zonas directamente afectadas por la hambruna y donde hay una mayor presencia de organizaciones internacionales para ayudar a los desfavorecidos se ha registrado en los últimos meses un aumento en el número de matriculaciones.
"Casi el 60% de las escuelas que se habían evaluado volvieron a abrir con una media de 53 alumnos más inscritos. Cada escuela necesita de media dos nuevas aulas para atender la creciente demanda", ha destacado la agencia de Naciones Unidas.
El estudio también muestra que las escuelas que han logrado volver a abrir han perdido a un 13 por ciento de sus maestros por la sequía y por los desplazamientos. La mayoría de las escuelas evaluadas por UNICEF no tienen acceso alguno a servicios esenciales de salud e higiene y, de hecho, el 97 por ciento de los centro carece de jabón y sólo el 14 por ciento ofrece información a los alumnos sobre higiene.
A pesar de que en la mayoría de las escuelas el agua potable se encuentra a unos 100 metros del centro, en el 28 por ciento de las escuelas los niños se ven obligados a caminar más de un kilómetro para poder beber.
"Las amenazas como la desnutrición extrema y las enfermedades, así como los conflictos, pueden impedir que cientos de miles de niños vean cumplidos sus derechos a asistir a la escuela y recibir una educación de calidad", ha afirmado el representante de UNICEF en Somalia, Sikander Jan.
"Si bien estamos agradecidos por el enorme apoyo que hemos recibido hasta el momento, se necesitan más fondos para proporcionar a las escuelas servicios esenciales que atraigan a los niños a la escuela y así poder mantenerlos en las aulas. Hacerlo ayudará a prevenir que disminuya el número de jóvenes cualificados para ofrecer una esperanza de futuro para Somalia", ha advertido.
La encuesta sobre las Necesidades Educativas en Somalia fue elaborada por un grupo sectorial de profesionales educativos somalíes e internacionales que trabajan para satisfacer las necesidades educativas de emergencia de los niños en Somalia. Este informe ha analizado 628 escuelas en 45 distritos y es el primer estudio exhaustivo que describe las condiciones de las escuelas en el centro y sur de Somalia desde el inicio del año académico 2011-2012. La evaluación se realizó a 497 escuelas primarias, 51 escuelas secundarias, y 80 centros no formales de educación.