Actualizado 09/07/2012 19:59

Un experto cifra en más de 3.000 los posibles casos de 'bebés robados' que se investigan en España

Isaac Maestre en los cursos de la UPO
EUROPA PRESS/UPO


CARMONA (SEVILLA), 9 Jul. (EUROPA PRESS) -

Isaac Maestre Maestre, letrado, jurista y secretario de la Asociación SOS Bebés Robados de Huelva, ha cifrado este lunes en los cursos de verano de la Universidad Pablo de Olavide (UPO) en Carmona (Sevilla) en torno a 3.000 las investigaciones sobre posibles bebés robados en España, aunque ha destacado que "su número aumenta cada día" porque "la mayoría de los afectados busca la verdad a través de las demandas y después lo que venga".

Tan solo en Huelva, durante el mes de mayo de este año se registraron 85 casos presentados a la Policía Nacional y 50 denuncias interpuestas en los juzgados que se amparan en el Artículo 39 de la Constitución. No obstante, Maestre es consciente de la dificultad de resolución de estos casos que en ocasiones cuenta con más de cuarenta años desde la desaparición, argumenta en una entrevista con Europa Press.

El especialista, que participa como ponente en el curso 'Desapariciones de niños. Investigación y contexto', ofrece la conferencia 'Desapariciones de bebés, realidad o sospecha. Análisis jurídico y social. El caso de los bebés robados en Andalucía'.

El proceso de búsqueda de bebés robados, indica Maestre, comienza "por una sospecha de la familia o afectado que cree que se le ha sustraído a su hijo o que él ha sido separado de su familia biológica".

Tras la sospecha, se inicia un proceso largo en el que se requiere ir recabando datos como "visitar el cementerio, el hospital, recoger certificados de nacimiento, defunción, estado clínico de la madre el día del parto" para posteriormente acudir a la vía extrajudicial e identificar testigos que aporten pruebas y testimonios fiables, argumenta el experto que ejemplifica "por ejemplo un testigo que dice que vio la transacción de dinero".

Una vez se ha llevado a cabo todo el proceso, dice "se puede acudir a la vía judicial interponiendo una demanda o una querella, por la vía penal". Las penas que rondan entre los cuatro y seis años de cárcel, suele ser "subjetivas" ya que observa "la disparidad de criterio en las diferentes ciudades, en unas prescribe y en otras se vuelven a reabrir".

Estas familias que optan por seguir todo el proceso investigativo y que han sido víctimas del robo de algún familiar, expone Maestre, responden a un perfil "humilde, de familias numerosas de tres o cuatro miembros en las que en el siguiente parto nacieron gemelos o mellizos", donde el delito era más fácil de cometer y la pérdida "no tan dolorosa".

Actualmente, cuando se identifica al "bebé" se puede tramitar el proceso de cambio del Registro Civil en el que cambiar el nombre de los familiares. No obstante para agilizar estos procesos, Maestre cuenta "se ha creado un Banco de datos de ADN, en los que las personas que duden de si han sufrido un caso de este tipo puede ir allí a dejar su muestra", en el que se extrae y se incluye a los datos para localizar rápidamente a familiares que también busquen "conocer de dónde provienen o cómo se produjo el robo".

El curso que se realiza hasta este martes en el Centro 'Olavide en Carmona' tratará también el impacto familiar y las derivaciones sociales en las desapariciones de menores, menores y medios de comunicación, los mecanismos sociales y la sensación de pérdida, las herramientas sociales, así como el rigor informativo frente al "morbo mediático" en la explotación de estos casos.