IBIZA 19 Jun. (EUROPA PRESS) -
El responsable del Programa de Aguas de WWF/Adena en España, Guido Schmidt, afirmó hoy que la proliferación de desalinizadoras no resolverá la falta de abastecimiento de agua que afecta a 1.200 millones de personas en el mundo, aunque señaló que sí esta justificada en enclaves como las islas Pitiusas, o el resto de Balears, donde es el único modo de surtir de agua potable a la población.
En declaraciones a Europa Press, consideró que velar por un correcto uso del agua, sobre todo en la agricultura, con una correcta gestión de los cultivos, es "esencial" en enclaves como las islas.
Se trata de una tendencia en aumento que, según Schmidt, amenaza al equilibrio ambiental y climático de las zonas costeras ya que no sólo transforma el agua del mar en agua dulce sino que con ello arrasa con elementos como el plancton, huevos o pequeños peces, e incluso con Poseidonias.
Y es que tal y como agregó se da el caso de algunas instalaciones donde no se realiza un control exhaustivo en su implantación como ocurre en algunos puntos del levante. Además, Schmidt destacó que en los últimos años se ha comprobado que sin una ordenación territorial sostenible "cualquier política de agua con el objeto de proveer agua de forma ilimitada es inviable".
Respecto a los campos de golf Schmidt manifestó que "no son los grandes causantes de este problema, ya que consumen menos agua que una superficie de maíz correspondiente". "Lo que sí es escandaloso es el 'boom' de la venta del ladrillo con este tipo de instalaciones deportivas como reclamo para encarecer los precios de estas viviendas".
El responsable del Programa de Aguas de Adena concluyó afirmando que hacer un uso responsable del agua es "imprescindible" ya que la desalinización "no es la panacea en ningún caso puesto que se trata de un proceso caro que requiere mucha energía, conlleva el vertido de salmueras y contaminantes al mar, la emisión de gases de efecto invernadero y la destrucción de zonas costeras valiosas".