MADRID 15 Sep. (EUROPA PRESS) -
La ONG Amnistía Intenacional (AI) pidió a España que "elimine la detención en régimen de incomunicación", por "violar los derechos de las personas privadas de su libertad", según manifestó la organización en un informe publicado hoy.
Así, la directora del Programa para Europa y Asia Central de Amnistía Internacional, Nicola Duckworth, tachó de "inadmisible" que en la España actual "una persona detenida por cualquier razón desaparezca durante días, como tragada por un agujero negro". "Esta falta de transparencia puede utilizarse para ocultar violaciones de derechos humanos", aseguró.
En el informe presentado por la ONG, se solicita que se ponga fin "a la detención en régimen de incomunicación" y, en esta línea, asegura que España mantiene "uno de los regímenes de detención más estrictos de Europa, con el que incumple las obligaciones que ha contraído en virtud del derecho internacional de los derechos humanos".
Según señala, la Ley de Enjuiciamiento Criminal de España permite mantener a una persona recluida en régimen de incomunicación hasta cinco días en todos los casos y hasta 13 si es sospechosa de delitos de terrorismo. Este periodo de 13 días se compone de una fase de hasta 5 días de incomunicación bajo custodia policial, que puede prorrogarse otros cinco días de incomunicación en prisión provisional. Además, en cualquier momento de la instrucción el juez puede imponer tres días más de detención en régimen de incomunicación.
"Durante su detención en régimen de incomunicación, la persona no puede hablar con un abogado ni con un médico de su elección", añadió Duckworth, que señaló que, mientras tanto, la familia "vive con la angustia de no saber lo que le ha ocurrido". También aseguró que "muchas personas detenidas en régimen de incomunicación afirman haber sido sometidas a tortura o malos tratos, aunque raras veces se investigan tales denuncias".
"NIEGA EL DERECHO A UN JUICIO JUSTO"
En esta línea, AI cree que "la detención en régimen de incomunicación niega a la persona sometida a ella el derecho a un juicio justo", así como que "tal régimen puede constituir en sí mismo trato cruel, inhumano o degradante", que además, "no se ajusta a las normas internacionales de derechos humanos".
Por otro lado, la ONG recuerda que "diversas organizaciones internacionales han expresado reiteradamente su preocupación por el riesgo de tortura y otros malos tratos que entraña la detención en régimen de incomunicación" y pone como ejemplo el caso de Mohamed Mrabet Farsi, detenido por cargos de terrorismo el 10 de enero de 2006 en su casa, cerca de la ciudad de Barcelona.
Según asegura AI, "durante su detención en régimen de incomunicación no pudo llamar a su abogado. Según ha contado a Amnistía Internacional, fue torturado y maltratado, pero tanto el médico que lo examinó como el juez de instrucción hicieron caso omiso de sus quejas". Además, la asociación de defensa de los Derechos Humanos explica que el Gobierno español "ha justificado el uso de la detención en régimen de incomunicación aduciendo razones de seguridad nacional y pública".
"La detención en régimen de incomunicación debe relegarse al pasado", zanjó Duckworth, que terminó diciendo que "ningún otro país de la Unión Europea conserva un régimen de detención con restricciones tan severas de los derechos de la persona detenida".