Actualizado 08/08/2007 14:04

Las autoridades indias desinfectan pozos y llevan agua y comida a la población por el miedo a epidemias tras las lluvias

Las aguas estancadas provocan miles de enfermos por diarrea, gastroenteritis y malaria


NUEVA DELHI, 8 Ago. (EP/AP) -

Las autoridades sanitarias indias han desinfectado pozos de agua y distribuido tabletas de cloro, comida y agua limpia entre los miles de habitantes que con prisa regresaban a su hogares mientras los altos niveles de las aguas a consecuencia de las fuertes lluvias en el norte del país descienden, según informaron las autoridades.

La mayoría de los afectados ha hecho caso omiso de las advertencias de las autoridades del estado de Uttar Pradesh de que no volvieran hasta dentro de un día o dos para permitir que los campos se recuperaran de las inundaciones, explicó L.B. Prasad, director general de Servicios Sanitarios.

Más de dos semanas después de que comenzaran las lluvias del monzón por el norte de India, Bangladesh y Nepal, muchos ríos se han desbordado, se han inundado plantaciones y al menos 390 personas han muerto, mientras que unos 19 millones se han quedado sin hogar.

Por el peligro a las enfermedades a consecuencia de las inundaciones, ya que el agua estancada atrae a mosquitos y otros insectos y puede provocar diarrea y gastroenteritis, los habitantes han recibido tabletas de cloro para limpiar el agua que beben y han sido advertidos de que en los próximos días no dejen de tomar precauciones.

Además, las organizaciones humanitarias internacionales han alertado de una inminente crisis sanitaria si las ayudas no llegan a los millones de personas que en el sur de Asia se han visto obligadas a abandonar sus hogares. Las previsiones meteorológicas anuncian más precipitaciones en esta región que ya ha sido devastada.

COMIDA, AGUA LIMPIA Y MEDICINAS.

Aprovechando el descanso que han dado las lluvias esta semana, los trabajadores humanitarios, el Gobierno y el Ejército han repartido urgentemente comida, agua limpia y medicinas para prevenir las enfermedades, aunque la magnitud del desastre hace parecer pequeños estos esfuerzos.

"Muchos de las zonas afectadas son hogar de comunidades pobres que sufren la falta de servicios sanitarios e higiénicos", explicó Marzio Babille, el director de Salud del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) en India, quien alertó que las aguas estancadas son un terreno letal para la diarrea y otras enfermedades a niveles de epidemia.

Babille indicó que la gente también corre el riesgo de sufrir infecciones de la piel, malaria, leptospirosis y dengue. Los niños, que representan el 40 por ciento de la población del sur de Asia, son particularmente susceptibles a estas enfermedades.

ENFERMEDADES.

En India, las autoridades señalaron que el problema radica en la contaminación de los pozos. Las cifras hablan de más de 1.000 personas enfermas en el estado de Uttar Pradesh, principalmente por cólera y gastroenteritis. Asimismo, en Bangladesh se han conocido 1.400 casos de diarrea esta semana, indicó Fadela Chaib, portavoz de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

El Programa Mundial de Alimentos (PAM) y UNICEF han estado distribuyendo provisiones de comida de emergencia para miles de personas en Bangladesh y Nepal, mientras que India no ha solicitado ayuda humanitaria, explicó el portavoz del PAM, Simon Pluess, en Ginebra.

Desde que comenzaron las lluvias del monzón el pasado junio, más de 1.200 personas han fallecido sólo en India, según datos del Gobierno, a los que hay que añadir las cifras de Bangladesh y Nepal, que se cuentan por cientos.