El balance de la ONU sobre los Objetivos del Milenio concluye que se ha dado un "claro progreso" pero falta mucha ayuda

MADRID, 2 Jul. (EUROPA PRESS) -

La ONU presentó hoy su Informe 2007 en el que hace balance del grado de cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio, cuyo plazo de ejecución, que vence en 2015, cruza ahora su ecuador. El texto habla de "un claro progreso" en la lucha contra la pobreza pero matiza que se trata de un "optimismo con preocupación" porque aún existen graves carencias, como la "brecha" del África Subsahariana y la falta de ayuda oficial al desarrollo (AOD).

No en vano, las partidas presupuestarias nacionales destinadas a los más desfavorecidos han sufrido en 2006 el primer descenso desde 1997 con una caída del 5,1%, cuando precisamente uno de los Objetivos del Milenio implica una reducción a la mitad de la pobreza en el mundo. En este sentido, Naciones Unidas denuncia que sólo cinco países (Dinamarca, Luxemburgo, Países Bajos, Noruega y Suecia) han hecho efectivo el compromiso de destinar el 0,7% del PIB a la ayuda al desarrollo.

Este déficit se agrava con la incapacidad de los Gobiernos para atender "el creciente problema" de los jóvenes sin empleo, cuyas cifras se han elevado de 74 millones en 1996 a 86 millones en 2006, con el consiguiente desperdicio del "potencial económico" de este sector de la población.

Asimismo, los esfuerzos del objetivo de los ODM de desarrollar "un sistema comercial y financiero abierto, previsible, basado en normas y no discriminatorio" también han sido "decepcionantes", según el informe, aunque resulta "alentador" el efecto de la Iniciativa para el Alivio de la Deuda Multilateral y la Iniciativa en Favor de los Países Muy Endeudados, dos programas "cruciales en la reducción anticipada del 90 por ciento de los títulos de deuda de países en desarrollo".

La lucha contra la pobreza "es una obligación moral", ya que "es inaceptable que el 63 por ciento de la mortalidad infantil en el mundo sea posible evitarla mediante intervenciones oficiales eficaces, rápidas y de bajo coste", declaró la directora adjunta de la Oficina del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Bélgica, Nicola Harrington, durante la presentación del informe de la ONU en la sede de la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI) en Madrid.

No obstante, el informe revela que la proporción de personas en el mundo que viven con el equivalente a un dólar al día ha bajado del 32 por ciento (1.250 millones) en 1990, al 19 por ciento (980 millones) en 2004, explicó Harrington. Si la tendencia continúa, la ONU estima que el Objetivo del Milenio para reducir a la mitad la pobreza extrema en el mundo se podrá alcanzar en el plazo fijado. "El mundo está bien encaminado para lograr el objetivo principal", afirmó la responsable.

En África Subsahariana, el porcentaje de población que vive en extrema pobreza ha pasado del 46,8 en 1990 al 41,1 por ciento en 2004. Los mayores avances se han logrado desde 2000 y la renta 'per cápita' ha aumentado en siete países subsaharianos en más de un 3,5 por ciento entre 2000 y 2005. No obstante, "a pesar del terreno ganado", según la ONU, en África subsahariana la brecha de pobreza "sigue siendo la más alta del mundo".

Las reducciones de pobreza extrema más importantes se han dado en el sur, sureste y este asiático. En cambio, en el occidente asiático el índice de pobreza se ha duplicado en el mismo periodo, según el informe. Además, a día de hoy, "el 90 por ciento de los recursos en la investigación se dedica a enfermedades que afectan al 10 por ciento de la población mundial".

El documento destaca otros objetivos en los que se han registrado avances, siempre en el marco de "optimismo con preocupación" que caracteriza a todo el informe, según palabras del secretario general de la AECI, Juan Pablo de Laiglesia, presente en el el acto.

Por ejemplo, la inscripción a instituciones de educación primaria en países en vías de desarrollo ha subido del 80 por ciento en 1991 al 88 por ciento en 2005 y la lucha de las mujeres por la igualdad de derechos "ha ganado terreno con su creciente participación en la política y el Gobierno"; la mortalidad infantil "ha bajado en todo el mundo" y la epidemia de tuberculosis está a punto de reducirse, aunque su prevalencia y tasa de mortandad no se quedarán en la mitad antes de 2015.

Con todo, más de medio millón de mujeres mueren al año por complicaciones en el embarazo y el parto, ha habido muy poco progreso en la reducción a la mitad de la proporción de niños con falta de peso y las muertes por sida en todo el mundo aumentaron de 2,2 millones en 2001 a 2,9 millones el año pasado. Además, prosigue el texto de la ONU, la mitad de la población de los países en vía de desarrollo no cuenta con acceso a servicios de saneamiento básicos.

Otro aspecto destacado es el de 'los efectos potencialmente catastróficos del cambio climático'. "Las comunidades pobres que no contribuyen al cambio climático son las que sufren sus efectos más severos", declaró Nicola Harrington.

EL CASO ESPAÑOL.

Respecto al papel de España en el cumplimiento de los Objetivos, de Laiglesia destacó la implicación del Gobierno y puso como ejemplos la participación de España en la Iniciativa contra el Hambre y la Pobreza, la búsqueda de mecanismos para que la inmigración sea "un importante factor de desarrollo" o la aprobación, en diciembre, de una partida de 528 millones de euros para el fondo del PNUD creado para los ODM.

Asimismo, la Ayuda Oficial al Desarrollo, aseguró, ha pasado del 0,25 por ciento del PIB en 2004 (menos de 2.000 millones de euros) al 0,42 de este año (4.200 millones), con el objetivo de alcanzar el 0,7 "en la próxima legislatura", todo porque afirmó el secretario general de la AECI, la política de cooperación se ha convertido en una "política de Estado".

De Laiglesia también destacó, como características de la cooperación española, la "calidad de la ayuda" mediante la creación de nuevos mecanismos de financiación o mejoras de los ya existentes, la relación con las organizaciones no gubernamentales y la promoción de "la coherencia en las políticas" de desarrollo.

"OBJETIVOS DE MÍNIMOS".

La Alianza Española contra la Pobreza ha denunciado que llegados al ecuador del plazo fijado para el cumplimiento de los Objetivos del Milenio (vencen en 2015) lo que son "objetivos de mínimos se están convirtiendo en metas inalcanzables" principalmente porque, acusan "falta voluntad política" para llevarlos a cabo.

Según declaró el presidente de la Coordinadora de ONG de Desarrollo, José María Medina, "van pasando los años (...) y la realidad es que los países más pobres no van a alcanzar ninguno de los objetivos" fijados, entre otras cosas porque "no hay una voluntad real" de que así sea y no existe "una conciencia social" efectiva sobre la urgencia del problema.

Medina recordó que "el alivio de la deuda externa no está recibiendo impulso" y puntualizó que "en el caso español, aunque se ha aprobado una ley al respecto, faltan pasos decididos" en materia de cancelación a los países pobres, así como "coherencia" en los planes de cooperación.